PUEBLA, Pue.- El aire huele a azúcar procesada y está excesivamente fresco. "En medio del área de producción de los chicles de menta cualquiera que no esté acostumbrado acaba llorando", explica la guía de la visita a la planta de Cadbury Adams México en la ciudad de Puebla. A partir del siguiente año ésta será la fábrica de chicle más grande del mundo, aseguran los directivos de la chiclera, por capacidad de producción.

La firma, comandada por Edgar Vallejo en México, produce 60 mil toneladas al año de la goma de mascar y dentro de unas semanas más ampliarán áreas y capacidad de producción, sobre todo en productos fabricados sin azúcar.

Durante 2005, los ejecutivos de Cadbury Adams han hecho inversiones importantes por alrededor de 45 millones de dólares para la ampliación de su planta en la capital poblana.

Crecimiento

"Este crecimiento estará orientado al área de goma de mascar sin azúcar, ya que ha sido la de mayor crecimiento en la demanda de los consumidores estadounidenses", explicó Carlos Gómez Rosales, vicepresidente de operaciones de México, Centroamérica y el Caribe de la firma.

Hoy día, desde la entidad poblana 15 por ciento de la producción es enviado a Estados Unidos, Canadá, Portugal, Bélgica, los países del Mercosur y hasta Japón. El restante 85 por ciento se destina al mercado doméstico, Centro América y el Caribe.

Con la construcción y adecuación de nuevo espacios en los terrenos de reserva contarán con más de 40 mil metros cuadrados de áreas de producción y con ello buscan modificar la mezcla de ventas: 20 por ciento de sus producción será vendido fuera del país.

Nuevos puestos

Además, con esta expansión en la producción generarán 150 nuevos empleos, es decir, este rubro crecerá 10 por ciento en 2006 respecto del número de trabajadores que tienen en nómina hoy día: mil 500.

También, para el siguiente año tienen planeado invertir casi 17 millones de dólares en diversas áreas de la planta y el corporativo en la ciudad de México.

Gómez Rosales detalló en breve conferencia de prensa que el insumo básico es el azúcar y se lametó de que en México haya los precios más altos del mundo. "Pese a ello no tenemos planes de usar ni alta fructosa ni ningún otro tipo de edulcorante. Seguiremos con nuestro ritmo de consumo de 100 a 150 toneladas diarias del endulzante", dijo.

La planta este año celebró 30 años de haber sido construida en Puebla y con la ampliación tratan de lograr los mejores resultados.