Una niña de 10 años de edad se transformó, en el centro de atención de su escuela, al distribuir entre sus colegas de clase de una escuela municipal, parte del dinero que halló en un basurero.

La alumna, identificada sólo con las inciales de su nombre E.D.F., halló 7 mil 800 reales (unos 2 mil 200 dólares) en billetes de 100 reales, en el basurero de una "favela" de la zona norte de la ciudad, que atraviesa todos los días camino a la escuela.

"Pensé que era falso", dijo la menor a la policía, llamada por la dirección de la escuela al verla con tanto dinero.

"Nunca había visto un billete de 100 reales en mi vida", añadió la niña explicando que el dinero encontrado estaba dentro de una bolsa.

De acuerdo con el policía Silvio Augusto, el dinero debe haber sido robado, puesto que el jueves pasado fue registrado un robo de 10 mil reales (unos 2 mil 800 dólares) de una panadería del mismo barrio.

"Los asaltantes probablemente se asustaron al ver llegar un patrulla de la policía y echaron el dinero en el basurero, para recuperarlo más tarde", dijo el cabo Augusto de la policia militarizada (PM).

Según el oficial, la niña puede quedarse con el dinero, si "el dueño no lo reclama a la policía".(AFP)

Un hombre que mató a golpes a su madre millonaria y a su padrastro, dijo que lo había hecho porque estaba furioso, no para quedarse con el dinero, informó hoy un juez, tras condenar al asesino a un mínimo de 24 años en prisión.

Matthew Wales, de 34 años, asesinó el 4 de abril del 2002 a su madre, la millonaria Margaret Wales, de 69 años, y a su esposo Paul King, de 75 años, en un crimen que atrajo la atención de toda la prensa australiana.

Sus cadáveres fueron encontrados dos semanas más tarde en una fosa común de poca profundidad, en una zona de matorrales.

Según John Coldrey, juez de la Corte Suprema del estado de Victoria, Wales dijo a la policía que existía "gran odio y deseos de causar daño" entre él y su madre, y que su furia había ido creciendo con el transcurso de los años.

Wales invitó a su madre y a su padrastro a cenar en su vivienda, en un elegante suburbio de la ciudad sureña de Melbourne, puso estupefacientes en sus bebidas para dejarlos inconscientes, los mató a golpes, y luego enterró sus cadáveres en una zona de arbustos, dijo la policía.

Wales no mostró remordimiento alguno durante la audiencia en que se leyó la sentencia, afirmó Coldrey.

El asesino declaró a detectives que no mató a su madre por el dinero, sino como reacción ante el uso que hacía su madre del dinero para manipularlo y denigrar a la familia de su esposa.

En realidad, dijo el juez, Wales se consideraba "un héroe, que había hecho un favor a todos al asesinar a Margaret y a Paul, pues nadie más en la familia había tenido el coraje de hacerlo".

La esposa de Wales, Maritza, de 39 años, fue condenada a dos años de cárcel en suspenso, tras ser acusada de mentir a la policía sobre el papel que había tenido su marido en los asesinatos. (AFP)