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La estrategia del crimen organizado para secuestrar a los migrantes se ha modificado. Ahora se realizan secuestros masivos a bordo de los trenes que cruzan el país, según los testimonios de los migrantes que solicitan ayuda en los albergues.

En el trayecto que corre desde Tabasco hasta Tamaulipas operan por lo menos cuatro bandas que secuestran a los migrantes cuando éstos abordan este transporte.

En la mayoría de los casos, los secuestradores los esperan en los vagones que tienen puertas corredizas y una vez ahí, a cada uno de los migrantes les piden su nombre, su país de origen y su dirección, así como el nombre y el teléfono de sus familiares en Estados Unidos o en la ciudad de donde provienen para pedir el rescate.

Por cada migrante, piden entre 100 y 300 dólares. Pero si hay una persona cuyos familiares no pagan el rescate, la arrojan del tren en movimiento. Si cubren el pago, los bajan para que puedan continuar su trayecto.

Varios de los migrantes aseguran que entre los secuestradores hay niños de entre 12 o 13 años de edad.

Leticia Gutiérrez, secretaria ejecutiva de la Pastoral de la Movilidad Humana del Episcopado Mexicano y coordinadora de la organización SMS Scalabrininas Misión para Migrantes y Refugiados, menciona que las bandas del crimen organizado se dividen el territorio nacional según los lugares por donde atraviesa el tren.

Así que la primer ruta controlada por la delincuencia comprende desde Tenosique, Tabasco, pasando por Palenque, en Chiapas hasta Medias Aguas, municipio de Sayula de Alemán, en Veracruz.

La segunda ruta de secuestro corre de Medias Aguas a Orizaba, Veracruz. Otra más controla la ruta que va de Apizaco, Tlaxcala hasta Huehuetoca y Tultitlán, en el Estado de México y otro grupo secuestra a los migrantes desde Celaya, Guanajuato, pasando por Nuevo Laredo, Reynosa y Matamoros, Tamaulipas. Leticia Gutiérrez señaló que estos datos han sido proporcionados a agentes del Ministerio Público “y no ha pasado nada, nadie hace nada”.

“Desde octubre del año pasado se han denunciado los secuestros, se pensó que ya se había superado, pero no es así y los lugares se han extendido”, explicó.