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El papa Benedicto XVI y el presidente de México, Felipe Calderón, dialogarán sobre la reforma legal que reconocerá la libertad religiosa en ese país durante el encuentro privado que sostendrán el próximo 24 de marzo y durante su estancia en territorio mexicano no se reunirá con las víctimas que denunciaron abusos sexuales por parte de Marcial Maciel, fundador de los Legionarios de Cristo.

El embajador mexicano ante la Santa Sede, Héctor Federico Ling Altamirano, anticipó que la propuesta de cambio al artículo 24 de la Constitución nacional centrará parte de la audiencia prevista en la Casa del Conde Rul, en Guanajuato.

Adicionalmente consideró posible que, durante el cara a cara, surjan asuntos como la lucha del Estado mexicano por hacer cumplir la ley en materia de seguridad.

A pocos días de la llegada del obispo de Roma a México, prevista para el 23 de marzo, el diplomático estableció que la expectativa popular “es impresionante” y añadió que “todo hace pensar que la visita provocará una gran sacudida de almas”.

El vocero del Vaticano, Federico Lombardi, descartó un encuentro de Benedicto XVI con las víctimas de abuso sexual del fallecido sacerdote Marcial Maciel, durante su visita a México. En un encuentro con la prensa internacional, Lombardi precisó que dicha reunión no fue solicitada por los obispos mexicanos y por tanto quedó excluida del programa oficial del viaje pontificio.

“Me parece que no fue solicitado, no tengo conocimiento y no está previsto en el programa, los obispos ciertamente no lo pidieron”, dijo el director de la sala de prensa de la Sede Apostólica.

“Carta de víctimas no llegó”

El sacerdote Manuel Corral, encargado de las relaciones públicas de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), que concentra a los más de 100 obispos del país, subrayó que ese argumento no es justificación, pero la información que les llegó es que las víctimas estaban realizando un sondeo y que enviarían una carta solicitando hablar con el Pontífice durante su visita al estado de Guanajuato, pero la misiva nunca llegó.

Corral dijo que la CEM tampoco tiene la agenda del diálogo que sostendrá el Papa con el presidente Calderón, por lo que no se tiene certeza de que hablarán de los cambios legales en México sobre libertad religiosa. Insistió en que para que las víctimas de abuso sexual estuvieran con Benedicto XVI se requería de más tiempo y la fecha de la visita, luego de que ésta fue confirmada, se da en un lapso muy corto. (Con información de agencias)