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El avión presidencial tiene 24 años de antigüedad. En la Presidencia de la República la idea de comprar una nueva aeronave no ha sido revisada, aunque de antemano saben las críticas que vendrían ante una decisión al respecto.

Cuando Nicolás Sarkozy, presidente de Francia, o Álvaro Uribe, ex mandatario de Colombia, Rafael Correa, de Ecuador, Luiz Inacio Lula, en Brasil, o Evo Morales, en Bolivia, compraron un avión nuevo para trasladarse en sus propios países o fuera de ellos, fueron objeto de críticas.

El pasado 16 de noviembre el pleno de la Cámara de Diputados exhortó a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público a renovar la flota aérea presidencial porque cumplió 24 años o más de antigüedad, a petición del diputado federal panista Luis Enrique Mercado.

“El Ejecutivo renovó el avión presidencial a finales del sexenio de Miguel de la Madrid, después de que la aeronave en funciones estuvo a punto de sufrir un accidente en la Península de Yucatán”, argumentó.

En entrevista, Mercado dijo que De la Madrid compró el TP01 que ahora usa Calderón, pero por la crítica no pudo estrenarlo, pues el país estaba en crisis galopante. “Se armó un escandalazo. Lo estrenó el presidente Carlos Salinas de Gortari”, quien dijo que fue comprado en administración anterior.

En un segundo párrafo del artículo tercero del dictamen de presupuesto se sugirió a Hacienda que haga las reasignaciones presupuestales necesarias para renovar el avión presidencial y otras aeronaves para garantizar la seguridad de quienes en ellos se transportan, explicó el legislador.

Mercado confió en que no pase lo que a Miguel de la Madrid y en esta misma administración estrenen avión presidencial.

“Podría ser lo mismo pero ojalá no ocurra porque la propuesta no vino de Presidencia de la República y aprobó mayoritariamente esa moción la Cámara de Diputados, aunque puede que haya un sector que diga que no es adecuado”, admitió el diputado panista.

“En un cuarto de siglo no se ha comprado un avión presidencial y en 24 años la seguridad y los equipos se modifican y nadie quiere tener un accidente de ese tipo, entonces más que un gasto es una inversión para prevenir que sucedan cosas que no deben suceder”, declaró.

Antecedentes

El planteamiento ocurrió días después de que el helicóptero en el que viajaba José Francisco Blake Mora, secretario de Gobernación, cayó en un cerro con sus ocho ocupantes el 11 de noviembre. Todos fallecieron, pero no era el primer incidente.

En 2005 también murió el entonces secretario de Seguridad Pública, Ramón Martín Huerta, y en 2008 se estrelló el avión Lear Jet en el que viajaba Juan Camilo Mouriño, secretario de Gobernación.

Entre abril y julio de 2011 el avión presidencial TP01 fue llevado a Estados Unidos a mantenimiento. Se le cambiaron asientos y colocaron pantallas nuevas de televisión.

Entre 2005 y diciembre de 2010, en México han ocurrido 49 accidentes o incidentes de aeronaves en México, según la base de datos del Buró Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB por sus siglas en inglés) de Estados Unidos.

Desde hace casi un año la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) alista un mecanismo para actualizar en México los “requerimientos para los instrumentos, equipo, documentos y manuales que han de llevarse a bordo de las aeronaves”, como son: modernos equipos Transmisor de Localización de Emergencia (ELT) y chalecos salvavidas con luz integrada con un costo por uniadd de 250 dólares.