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A ocho años de otorgarse cobertura universal para la atención del VIH-sida en México, los recursos presupuestarios han sido insuficientes en algunos casos y en otros, se han detectado desvíos, utilizándose los recursos para lo que no estaba destinado.

Según el documento Medición del gasto en Sida (Megas) para el periodo 2008-2009, obtenido mediante la solicitud de información con número de folio 0001200092511, del 23 de marzo de 2011 a la Secretaría de Salud, el gasto total en VIH/sida en 2009 fue de 5 mil millones 185 mil 600 pesos.

Sin embargo, en el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) solamente es posible identificar al Programa “Prevención y atención del VIH/SIDA y otras ITS” (Programa Presupuestal P016), único programa que etiqueta recursos para el VIH/sida de todo el Presupuesto Federal y al cual no se le asigna esa cantidad de dinero.

De acuerdo con una investigación de Fundar, Centro de Análisis e Investigación A.C., en 2009, el presupuesto del Programa “Prevención y atención del VIH/Sida y otras ITS”, fue de 193 millones 300 mil pesos, una cantidad muy pequeña (aproximadamente 3.73%) del gasto estimado en el Megas.

“Aunque el Megas indica que en 2009 se calculaba gastar 2 mil 741 millones de pesos en la compra de tratamientos antirretrovirales (aproximadamente 52.85% del gasto total en VIH), quedan aún mil 751.3 millones de pesos que Megas no explica de manera concreta dónde, quién o en qué se gastaron”, explicó Felipe Varela, investigador de Fundar y quien elaboró la investigación a partir de decenas de solicitudes de investigación.

Respecta al presupuesto al que sí se le puede seguir la pista, existen anomalías tanto en la asignación como en el ejercicio de los recursos destinados para la prevención y atención del VIH/sida.

Destacan los casos del Hospital General Manuel Gea González, los institutos nacionales de Perinatología, de Cancerología y de Enfermedades Respiratorias, los cuales atienden a personas con sida. Llama la atención el presupuesto recibido por estas dependencias contra el número de pacientes atendidos y el costo que tiene la atención de los mismos y el ejercicio que se hace del presupuesto aprobado en actividades, insumos o servicios ajenos a la atención del sida.

“Sobre todo porque existen otros hospitales e institutos que también atienden a pacientes con sida y no reciben presupuesto, o es muy bajo respecto a la población atendida, del mencionado Programa”, detalló Felipe Varela, investigador de Fundar, quien explicó que estos son los casos del Hospital Infantil de México Federico Gómez, el Hospital General de México o el Instituto Nacional de Pediatría.

“En el caso del presupuesto versus pacientes atendidos, llama la atención el caso de que Hospital General Manuel Gea González, el Instituto Nacional de Perinatología, el Instituto Nacional de Cancerología a pesar de no contar con un servicio especializado en pacientes con sida han ejercido en conjunto 138.31 millones de pesos constantes a 2012 en el periodo 2004-2010. Por su parte, el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias, que sí cuenta con una clínica especializada, de hecho es el instituto que mayor número de pacientes con sida atienden en el país, ha ejercido en el mismo periodo 92.44 millones de pesos”, detalló Varela, lo cual significa menos dinero para un lugar que atiende a más personas.