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El 6 de noviembre de 1987 comenzó operaciones como el helicóptero personal del presidente Miguel de la Madrid, pero la adquisición de nuevas aeronaves para el transporte de los mandatarios, hizo que “lo relegaran” a tareas de apoyo para el traslado de otros funcionarios del gobierno federal a partir del sexenio de Ernesto Zedillo.

En este helicóptero Superpuma HTP-06 fabricado en 1983 y adquirido por la Fuerza Aérea Mexicana, que hace 24 años y cinco días se designó para el Ejecutivo y también fue utilizado por Carlos Salinas de Gortari, perdió ayer la vida el secretario de Gobernación, José Francisco Blake Mora, tres de sus colaboradores y cuatro militares, en un accidente cuyas causas se investigan.

Un reporte de la Sociedad Mexicana de la Aviación (SMA), elaborado por su director José Serur y el experto José Antonio Quevedo, obtenido por EL UNIVERSAL, da cuenta de la historia de esta aeronave que hoy marca un episodio trágico en el país, y que durante cinco administraciones federales formó parte de la flotilla que utiliza el Estado Mayor Presidencial para realizar misiones en México y Centroamérica.

Era parte de diez “pumas”, helicópteros que transportan presidentes, primeros ministros, reyes, altos funcionarios extranjeros y miembros de organizaciones internacionales durante sus visitas a México.

Fabricado por la empresa Eurocopter, el helicóptero Súper Puma siniestrado ayer —modelo AS 332— pertenece a un modelo de aeronaves que comenzó a adquirirse en 1982 para transporte de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), fue en 1983 cuando se incorporó a la Unidad Especializada de Transporte Aéreo del Alto Mando (UETAAM).

Los expertos lo consideran un aparato de alto rendimiento y con elevados estándares de seguridad, pues sólo existe registro de dos accidentes de los Súper Puma: el primero en el Aeropuerto Internacional de Guadalajara el 8 de febrero de 1986; así como en el poblado de Ayutla, Oaxaca el 29 de noviembre de 1987, “sin que tuvieran consecuencias graves”.