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En la última década el gasto que se dedica a la educación en México presenta variaciones con una “tendencia a la baja”, al colocarse en promedio en 5.4% de Producto Interno Bruto (PIB), lejos de lo que marca la Ley General de Educación, que establece invertir 8% del ingreso nacional.

Durante este periodo se observa que el presupuesto que se dedica a la educación básica es “cada vez menor”, establece el Centro de Investigación Económica y Presupuestal, al realizar un estudio como parte de las labores de la Fundación Hewlett.

El documento señala que entre el año 2000 y el 2010 se invirtieron 6.5 billones de pesos en la educación en México.

El mayor incremento se otorgó a la educación media superior, así como a la educación superior, de 61.4% y 60.6%, respectivamente.

Del total de recursos invertidos en la educación, 21.2% fueron fondos de los estados. Esa proporción se mantuvo a lo largo de ese periodo, teniendo como mínimo el año 2010 (77.3%) y máximo el 2001 (80.7%). “Refleja que las entidades tienen cada vez más gasto en educación con recursos propios”, indica la investigación.

“El gasto público en educación en México durante el periodo 2000 a 2010” establece “variaciones constantes y con una tendencia a la baja, lo que hace que el presupuesto asignado sea cada vez menor”.

La investigación refiere que los recursos aportados por el gobierno federal son cada vez “menores” y los recursos aportados por los gobiernos estatales “van en aumento”.

El Estado de México es la entidad que realizó un mayor gasto en educación durante este periodo, seguido de Veracruz y el Distrito Federal.

Por el contrario, Colima, Baja California Sur y Campeche son los estados que presentan el menor gasto.

Pero si se analiza a las entidades por el crecimiento en el gasto, el Centro de Investigación Económica y Presupuestal ubica que Yucatán es la entidad con el mayor incremento con 71.1%, seguida de Tamaulipas (70.2%) y Michoacán (68.5%).

Son Chiapas y Tabasco quienes en ese periodo realizaron aportaciones menores en promedio con 26.9% y 28.9%, respectivamente.

El incremento en los recursos propios que se destinaron a la educación creció en la década en 83.7%. Tamaulipas, Michoacán, Nayarit, Quintana Roo, Yucatán, Aguascalientes, Morelos e Hidalgo lograron por lo menos duplicar su gasto.

Cambio de política

El documento que tiene como propósito hacer un análisis de la evolución del gasto, así como saber quiénes han sido los responsables de administrar el presupuesto público y en qué forma lo han hecho, concluye que existe un cambio en la política educativa del país a fin de dar atención a nuevas demandas de educación, en particular, para atender las solicitudes de jóvenes para ingresar al bachillerato y el sistema universitario.

El análisis sobre el destino del gasto, advierte que el llamado gasto corriente que incluye el pago de la nómina con salarios y prestaciones, así como lo que se destina para la operación del sistema se incrementó de 90.8% a 95.8%, en tanto que el resto de los recursos, para nuevos proyectos o innovaciones en el sector se redujo de 9.2 a 4.2% en la década.

A la educación básica se le han canalizado seis de cada 10 pesos de los 6.5 billones de pesos en todo este periodo; y creció a un ritmo de 3.5%. Le sigue la educación superior con un ritmo de incremento de 5%; en ese mismo porcentaje se elevó el nivel de bachillerato; mientras que el posgrado creció a un ritmo de 2.3% en ese lapso.