DALLAS.— Un juez federal estadounidense negó la libertad bajo fianza a los tres funcionarios públicos de la pequeña comunidad fronteriza de Columbus, Nuevo México, detenidos la semana pasada bajo cargos de contrabando de armas hacia México.

El juez federal William Lynch dispuso este martes, durante una audiencia en Las Cruces, Nuevo México, que el alcalde de la localidad, Eddie Espinoza; el jefe de la Policía, Ángelo Vega, y el regidor José Blas Gutiérrez, permanezcan en la cárcel mientras se inicia su juicio.

Lynch consideró que los tres constituían un peligro para la comunidad y un riesgo de fuga, por lo que les negó la libertad incluso bajo supervisión.

También negó la libertad bajo fianza a otros cinco sospechosos, de entre los 10 detenidos del pasado jueves, acusados de participar en una red fronteriza de tráfico de armas.

Sólo las dos mujeres del grupo de detenidos, Gabriela Gutiérrez, esposa del regidor Blas Gutiérrez, y Eva Lucie Gutiérrez, recibieron autorización para salir en libertad bajo supervisión, luego de pagar fianzas de 10 mil dólares.

En la audiencia de este martes, los 10 acusados se declararon inocentes de todos los cargos —conspiración, compra ilegal y contrabando de armas— que la Oficina del Procurador Federal en Nuevo México presentó en su contra el jueves pasado.

La acusación sostiene que entre enero de 2010 y marzo de 2011, los imputados participaron en una conspiración para adquirir armas para su exportación ilegal a México.

Precisa que a lo largo de esos 14 meses, los acusados habrían comprado unas 200 armas de fuego en varias armerías del sur de Nuevo México, incluyendo la tienda Chaparral Guns, ubicada en Chaparral, Nuevo México.

Tres de las armas adquiridas por el grupo fueron localizadas en el sitio de una masacre en Palomas, Chihuahua, y en un decomiso en Ciudad Juárez, revelaron este martes procuradores federales presentes en la audiencia.

Otro sospechoso, Ignacio Villalobos, de 24 años, sigue prófugo. (Notimex)