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Para que la frontera común sea realmente segura, el gobierno de México continuará insistiendo en dos temas: detener el tráfico ilegal de armas desde Estados Unidos y en una reforma migratoria, afirmó Arturo Sarukhán, embajador de México en esa nación.

En el foro sobre La Frontera del Siglo XXI realizado en el Instituto de Nueva Política en Washington, donde participó Alan Bersin, comisario de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza, Sarukhán señaló que el gobierno de México no está en contra de la segunda enmienda que permite a los estadounidenses comprar armas, pero mantendrá la petición de que se restablezca la prohibición de la venta de armas automáticas.

Tras la visita del presidente Felipe Calderón a Washington, en donde se reunió con Barack Obama y el Congreso, el gobierno estadounidense rechazó la petición del mandatario mexicano para reinstalar la prohibición en la venta de armas automáticas.

Saruhkán indicó que el presidente Obama ha expresado su imposibilidad de proceder con la reinstalación de la prohibición para la venta de armas, “no es la primera vez que lo dice, pero no por ello el gobierno mexicano dejará de subrayar la importancia que ésta medida podría tener para dramáticamente revertir la posibilidad de que la delincuencia organizada en México acceda a armas de alto poder”.

Saruhkán dijo que el gobierno mexicano entiende el difícil entorno político estadounidense sobre el tema, pero consideró que la obligación de México es seguir apuntando a la vinculación directa que hay entre que esa prohibición y el calibre de armas que se están asegurando en nuestro país.

Que México haga su parte

El comisario Alan Bersin comentó que la prohibición de venta de armas automáticas no está basada en tiempos, y por otra parte proyectó que la violencia en la frontera podría aumentar en los próximos meses, pero aseguró que los gobiernos de ambos países estarán trabajando para combatir a los cárteles y los efectos generados por las pugnas que existen entre los grupos rivales y la lucha que mantienen contra el gobierno.

Saruhkán añadió que debido a que la violencia en la línea divisoria se ha convertido en algo tan importante, los controles que existen actualmente han hecho que sea más segura.

Insistió en que “la mejor forma de asegurar que la frontera sea segura será con una reforma migratoria”.

En contraparte, Bersin respondió que el tema migratorio implica corresponsabilidad y México debe generar más empleos y seguridad.