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Un total de 17 mexicanos están bajo cuarentena en Singapur, China y Hong Kong, sin tener síntomas de contagio del virus de influenza A H1N1, de acuerdo con un reporte de la Secretaría de Relaciones Exteriores, que reiteró su aviso de no viajar a estas naciones ante las medidas que han adoptado para evitar la propagación de la enfermedad.

En tanto, el mexicano contagiado con el virus en Hong Kong ya fue dado de alta después de permanecer una semana en el hospital, y 350 personas que tuvieron contacto con él fueron “liberadas” del aislamiento al que fueron sometidos por las autoridades de ese país.

A través de un comunicado, la Cancillería anunció que “ha intensificado sus gestiones diplomáticas para promover una resolución pronta de tales situaciones”, por lo que incluso se ha ordenado a los embajadores acreditados en estos países asiáticos a “utilizar los canales diplomáticos que sean necesarios para insistir en el respeto a los derechos humanos de connacionales”.

Indicó que “ha reforzado sus labores de monitoreo en relación con las medidas restrictivas al libre movimiento de personas y de bienes que algunos países han adoptado con motivo de la alerta epidémica” por la influenza A.

Ante la persistencia de casos de aislamiento sanitario en China y Singapur, la SRE mantiene su recomendación de “posponer o cancelar el viaje” a esos países y a quienes ya se encuentran en ellos, informar a la Embajada o a alguno de los consulados de México en China, en especial, aquéllos a los que se les apliquen medidas de cuarentena o confinamiento, para recibir asistencia.

Mientras que el gobierno de Hong Kong anunció que el mexicano —de 25 años de edad—, que fue contagiado por el virus abandonó la mañana del viernes el Hospital Princess Margaret, después de ser atendido durante una semana de la afección.

Las personas que estuvieron en contacto con el paciente —quien llegó el 30 de abril procedente de Tijuana, Baja California—, también concluyeron su cuarentena. Dejaron el aislamiento 286 personas —entre clientes y personal—, que estuvieron confinadas en el Metropark Hotel, además de 64 pasajeros del avión en el que viajó el mexicano, que fueron puestos en observación en el centro vacacional Sai Kung MacLehose.