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Un tribunal federal ratificó las sentencias de entre 22 y 42 años de cárcel para los cinco detenidos y acusados por el llamado narcovideo, un caso que se produjo en 2005 cuando miembros del cártel de los Beltrán Leyva, con ayuda de agentes federales corruptos, detuvieron una célula de Los Zetas, ejecutaron a uno de ellos frente a una cámara, y luego enviaron el video a un periódico en Estados Unidos.

El segundo tribunal unitario de Guerrero confirmó la sentencia de 42 años de prisión a Salvador Emeterio Luna Rocha y José Rodolfo Hernández Montes. También confirmó las sentencias, de 22 años de prisión, dictadas contra Eduardo Mongoy Becerril, Daniel Zúñiga Oloño y Uriel Martínez Madera.

De acuerdo con lo asentado en la toca penal 271/2008, el tribunal decidió dejar firme la sentencia dictada el 21 de octubre de 2008 por el juzgado tercero de distrito en Guerrero.

Este caso fue la primera declaración de guerra directa entre Los Zetas y el cártel de Sinaloa, al que en aquel momento se encontraban unidos los Beltrán Leyva. Por este asunto, la zona comprendida entre Acapulco e Ixtapa-Zihuatanejo, en Guerrero, y Lázaro Cárdenas, en Michoacán, fue zona de combate entre ambas organizaciones.

A los acusados se les encontró culpables de la comisión de los delitos de delincuencia organizada, posesión de cartuchos de uso exclusivo del Ejército, delitos contra la salud en la modalidad de colaboración para posibilitar las modalidades de introducción, posesión, transportación, comercio, tráfico y extracción de cocaína.

A Luna Rocha y Hernández Montes también se les consideró culpables del delito de secuestro, pues fueron señalados como quienes, junto con sicarios de los Beltrán Leyva, levantaron a una de las víctimas del narcovideo.