jorge.ramos@elunivesal.com.mx

arturo.zarate@eluniversal.com.mx

ACAPULCO, Gro.— La pelea por la presidencia de la Mesa Directiva del Senado de la República se reavivó desde este puerto. Carlos Navarrete, coordinador de la bancada perredista, acusó al gobierno y al PAN de entrar con el PRI a una “extraña relación” de “pégame pero no me dejes”.

Recordó que con Creel, ex coordinador panista, y Fabio Beltrones, líder del grupo parlamentario del PRI, acordó que el PRD presidiría el Senado, “pero que si ahora el nuevo jefe de los senadores del PAN, Gustavo Madero, quiere tirar ese acuerdo, que se atenga a las consencuencias”.

—¿Cuáles van a ser esas?

—Ya lo veremos…

—¿Es una amenaza?

—No, no tengo tono de amenaza ni siquiera de mal humor, simplemente como una reflexión. Si la nueva relación entre el PAN y el PRI es ‘te premio para que me pegues’ o peor aún, aunque suene machista: si el PAN y el gobierno van a adoptar con el PRI la política de ‘pégame lo que quieras pero no me dejes’, pues que sigan premiando al PRI en su golpeteo que tienen y ahora le entregan la Junta de Coordinación Política.

Listo, Gustavo Madero

En las filas panista y priístas aseguran que Gustavo Madero llegará a la presidencia de la Mesa Directiva del Senado.

José González Morfín, coordinador adjunto del PAN, dijo que cuenta con el apoyo de su bancada para presidir ya sea la Mesa Directiva o la Junta de Coordinación Política.

El senador Creel informó que ha decidido hacerse a un lado de este proceso por lo que no buscará la reelección como presidente de la Mesa Directiva.

Aclaró que no es cierto que se haya establecido desde hace un año un acuerdo para dejarle esa presidencia a Carlos Navarrete.

De esta manera, se despeja el camino para que Madero sea electo mañana como presidente de la Mesa Directiva.

Si el Partido Acción Nacional se queda con la presidencia de la Mesa Directiva del Senado, el priísta Manlio Fabio Beltrones se mantendría en la titularidad de la Junta de Coordinación Política.

Carlos Navarrete está descartado de antemano para encabezar dicha junta, porque en términos de la Ley Orgánica del Congreso, la pueden presidir los grupos que por lo menos tengan 25% de total de integrantes de la Cámara Alta.