Amenaza de bomba en conferencia de Fox en EU
LOS ÁNGELES.— Los efectos telúricos de la gira del ex presidente de México, Vicente Fox Quesada, por Estados Unidos alcanzaron la noche del pasado lunes al legendario Teatro de Landmark de Nueva York y frustraron una recepción que se había preparado en su honor al término de la conferencia. Empleados de este recinto, enclavado en la ciudad de Syracuse, confirmaron a EL UNIVERSAL el apurado y caótico desalojo, por una amenaza de bomba, que se produjo mientras el ex presidente dictaba su conferencia. Las escenas —más propias de una vieja película de cine mudo que se proyectarían por primera vez en ese teatro hacia fines de los 20— convirtieron el acto en una ceremonia de la confusión en la que tanto el ex presidente como su esposa, Marta Sahagún, tuvieron que ser sacados en volandas para evitar una desgracia. “La amenaza se produjo mientras el señor Fox hablaba, posteriormente personal de seguridad del teatro y policías se encargaron de ordenar el desalojo de las casi mil personas que asistían al acto. Una vez que la policía revisó el recinto con sus perros, la gente pudo regresar y el conferencista pudo reanudar su discurso”, aseguró Mary Ann, una empleada del teatro que supervisa las entradas del recinto y la venta de boletos. “A esa hora no había más de mil personas”, subrayó para hacer alusión al aforo de un teatro que cuenta con más de 3 mil plazas. La amenaza de bomba también fue confirmada desde el servicio de llamadas de emergencia 911 en el condado de Onondaga, desde donde se distribuyó a la policía local y a los sistemas de urgencia hospitalaria para tomar medidas precautorias. “La amenaza provino desde el interior del teatro mientras el señor Fox hablaba”, dijo un operario del 911 para confirmar así que la llamada se produjo aproximadamente a las ocho y media de la noche. La accidentada conferencia de Vicente Fox incluyó además un episodio de insultos y recriminaciones de algunos asistentes a la conferencia que el ex presidente de México aprovechó para destacar los logros de su administración en su lucha contra la pobreza y en favor de una reforma migratoria justa y humanitaria. La amenaza de bomba frustraría, sin embargo, la celebración de una recepción que se había preparado en su honor en un teatro emblemático de Nueva York, que fue erigido hacia fines de los años 20, para convertirse en uno de los primeros recintos que apostaron por el cine mudo.