D esde el desvío de recursos de Pemex al sindicato petrolero (Pemexgate ) en 2000, hasta la entrega de recursos convenidos con el mismo sindicato en 2004, Pemex detectó irregularidades que mantuvo bajo reserva y que representan daño patrimonial para la empresa.

En los Libros Blancos que sustentan el desempeño de la paraestatal durante la administración pasada, quedaron al descubierto al menos dos problemas que son un ejemplo de la facilidad como se manejan los recursospetroleros:

Una de las entregas de recursos hechas por Pemex al STPRM fue depositada el 19 de octubre del 2000, en la institución financiera Pershing Bank, en la ciudad de Nueva York, mediante un abono inicial por 39 millones de dólares por presuntos adeduos que se tenían con dicha organización, según los documentos oficiales avalados por el ex director de Pemex Luis Ramírez Corzo y el entonces titular del Organo de Control Interno de Pemex, Gregorio Guerrero Pozas.

Esos recursos nunca fueron utilizados por el sindicato petrolero porque la Corte de Circuito de Houston, Texas, ordenó un "Writ Gamishment" equivalente a un auto de embargo, dado que en Estados Unidos existía un juicio en contra de Petróleos Mexicanos y del propio sindicato por parte de la empresa Arriba Limited por incumplimiento decontrato.

Pemex tuvo que pagar a uno de los despachos más importantes de ese país, la firma McClain, Leppet & Maney entre 2.4 y 6.9 millones de pesos para repatriar a México, a una de las cuentas de Pemex, cinco años después esos recursos.

Transferencia en 2006

Despúes de negociar con el ´Attorney´ General de Estados Unidos, equivalente a la PGR y con George Muñoz, entonces representante del sindicato petrolero en el vecino país del norte, los fondos fueron transferido a México en mayo de 2006".

Pero el problema del Pemexgate, no quedo ahí, la Auditoría Superior de la Federación documentó que el 31 de agosto de 2003, el sindicato petrolero firmó a favor de Pemex una Declaración de Reconocimiento de Adeudo por mil 580 millones de pesos, tras admitir que los convenios administrativos que dieron pie a la transferencia de recursos, "pudieron haber sido un pago indebido y que para resolver cualquier conflicto, el gremio petrolero devolvería el dinero en enteros por concepto de retención de cuotas sindicales".

El primer pago que registró la Subgerencia de Tesorería Operativa de Pemex comprende del 1 de enero de 2004 a junio de 2005, por un monto de 69 millones de pesos.

Más aún, el Consejo de Administración de Pemex, que encabezaba Francisco Gil Díaz avaló también que los respectivos intereses generados por ese adeudo, equivalente a mil 461 millones de pesos, fueran pagados en abonos a partir del 1 de junio de 2018 al 1 de septiembre del 2031.

El otro problema, es el reconocimiento de que los recursos entregados al sindicato para la construcción de viviendas para trabajadores petroleros es tan turbio como el Pemexgate.