Andrés Manuel López Obrador emitió anoche la convocatoria a la Convención Nacional Democrática Por el Bien de Todos, en la que rememoró el inicio del Plan de Ayala por parte de Emiliano Zapata.

El perredista lanzó la convocatoria con base en el artículo 39 de la Constitución, que señala que "la soberanía nacional reside esencial y originalmente en el pueblo. Todo poder público dimana del pueblo y se instruye para beneficio de éste. El pueblo tiene en todo tiempo el inalienable derecho de alterar o modificar la forma de su gobierno".

La convención se realizará, según dijo, en el zócalo capitalino con el objetivo de iniciar "una discusión sobre la crisis política abierta por la imposición antidemocrática y la solución a los problemas fundamentales (.) con el propósito fundamental de decidir con representantes de todos los pueblos del país el papel que asumiremos en la vida pública de México ante la actual circunstancia".

Al encabezar su cotidiana "asamblea informativa" en el zócalo de la ciudad de México, López Obrador dijo a sus seguidores que "ahora recordé un hecho histórico, en un jacal, entre Puebla y Morelos, se firmó el Plan de Ayala, y cuando lo firmó el general Zapata salió y dijo, el que no tenga miedo, que pase a firmarlo".

En seguida estampó su firma y le siguieron dirigentes políticos de la coalición Por el Bien de Todos. Leonel Cota, líder nacional del PRD, fue el segundo, posteriormente el empresario Fernando Shutte, el líder de Convergencia, Luis Maldonado, la actriz Jesusa Rodríguez y Alberto Anaya, de la dirigencia del Partido del Trabajo.

López Obrador señaló que "de consumarse el fraude electoral para imponer al candidato de la derecha en la Presidencia de la República se estaría pisoteando la voluntad del pueblo expresada en las urnas el 2 de julio y violando a la vista de todos la Constitución, a este agravio que representa en los hechos reducir la democracia a una mera farsa había que agregar la decadencia y el descrédito de las instituciones que han dejado de representar el interés general del pueblo".

Insistió en que "se confirmaría que una minoría rapaz ha secuestrado a las instituciones y se ha dedicado a imponer autoridades para incrementar y mantener privilegios, sin interés alguno en el destino del país y mucho menos en los reclamos de todo un pueblo que se ahoga en la injusticia y la pobreza".

La comisión organizadora de la convención la integran José Agustín Ortiz Pinchetti, la actriz Jesusa Rodríguez, el perredista Rafael Hernández, la diputada federal Socorro Díaz, el senador electo de Convergencia Dante Delgado, el petista Gonzalo Yánez, la escritora Elena Poniatowska y el empresario Fernando Shutte.

Luego de terminar la lectura de la convocatoria, López Obrador fue el primero en firmar el documento en el templete frente a sus simpatizantes, a quienes pidió que a partir de ahora hagan lo propio y comiencen la difusión y discusión sobre los temas que serán abordados en el marco de la convención nacional democrática, sobre la crisis política postelectoral.

El político tabasqueño volvió al asunto del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.

"En el recuento perdieron votos nuestros adversarios, el candidato de la derecha (Felipe Calderón). Tenía votos de más, votos ilegales y quedó de manifiesto una grave irregularidad: que sobran o faltan miles de boletas electorales, que muchos votos fueron fabricados por los funcionarios de casilla".

En su opinión hubo cambio ilegal de votos "y que sacaron votos que pertenecían a la coalición, a favor de nosotros. Todo quedó de manifiesto, el Tribunal tiene todos los elementos para actuar. Ya aquí se ha expresado que si se anulan esas casillas con votos de más o de menos se tiene que confirmar que nosotros ganamos la Presidencia de la República".