El Senado de la República desapareció la ley seca en los comicios federales, y con 84 votos en favor, reformó la ley electoral para permitir que el día de la elección puedan abrir y dar servicio establecimientos que expendan bebidas embriagantes.

La reforma modifica el artículo 239 del Cofipe para quedar así: "El día de la elección y el precedente, a juicio de las autoridades competentes y de acuerdo con la normatividad que exista en cada entidad federativa, se ordenará, cuando sea indispensable para preservar el orden de la jornada, el cierre de los establecimientos que expendan bebidas embriagantes".

Esta modificación operará ya para la elección presidencial del próximo 2 de julio, debido a que el dictamen considera que no es una reforma fundamental porque no implica ningún cambio en las instituciones ni en los procedimientos del proceso electoral.

El dictamen aprobado refiere que la prohibición de venta de bebidas alcohólicas ya no tiene razón de ser, debido a que las condiciones de seguridad han ido variando desde la implementación de la llamada "ley seca" hasta nuestros días.

Al crear la norma, precisa, se buscó reducir los actos de violencia extrema y los índices de delitos como el homicidio o las lesiones producidas con armas de fuego.

Sin embargo, añade que los tiempos de violencia han quedado atrás, el nivel de civilidad política que impera en las zonas urbanas, la ciudadanización de las autoridades y los procesos electorales, el nivel de transparencia y confiabilidad de las instituciones encargadas de los comicios, tanto local como federal, hacen obsoleta esta disposición.

Además, establece que a través del derecho de voto los ciudadanos intervienen en la vida política del país, ya sea creando al Estado, conformando al gobierno o eligiendo a sus representantes, y al programa político de conformidad al cual se debe gobernar al país.

Precisa que la ley electoral contiene una serie de disposiciones que señalan la forma de cómo se desarrollará la jornada comicial para que el ciudadano pueda votar.

Entre ellas, refiere el documento, se establecen disposiciones para asegurar y garantizar el desarrollo pacífico de la jornada electoral. Una de estas es la que señala que el día de la elección y el precedente permanecerán cerrados los establecimientos que, en cualquiera de sus giros, expendan bebidas embriagantes.

"Dicha disposición garantiza de manera muy subjetiva que los ciudadanos en primer término acudan a votar a la casilla; en segundo, que lo hagan con plena conciencia de sus actos, lo cual figurará que ejercerán su derecho de voto de una manera responsable; en tercero, que es el más importante, disminuye la posibilidad de que se presenten conflictos durante la jornada electoral", agrega.