Madrid, España.— Gravar la contaminación, dejar atrás el carbón y eliminar los subsidios a la energía fósil son elementos de la receta del ex presidente mexicano Felipe Calderón, para frenar el cambio climático, sin dañar el crecimiento económico.

Calderón, quien participó en el foro “Las negociaciones internacionales sobre cambio climático: oportunidades para la economía española”, codirige la Comisión Global sobre la Economía y el Clima, junto al economista británico Nicholas Stern.

El ex mandatario mexicano dice que no se actúa contra el cambio climático debido a la “percepción” de que implica costos y sacrificios. Durante las últimas décadas, recordó, se han acelerado como nunca antes los eventos climáticos violentos: inviernos extremos en Estados Unidos; sequías en China, inundaciones en Europa y huracanes en Asia.

Según el Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático de las Naciones Unidas (IPCC), la mayor red científica del mundo dedicada a estudiar este fenómeno, el planeta ha registrado un aumento de 0.8 grados desde la era industrial, la mayor conocida.

Al frente de la comisión, formada por dos Nobel de Economía y personas con sesgo económico del sector privado y público, Calderón defendió que el desarrollo económico es compatible con la lucha contra el cambio climático, si se actúa en energía, uso de la tierra y ciudades. Para lo cual debe haber “detonadores” o “generadores del impulso económico”: productividad de recursos naturales e innovación en tecnologías de energías limpias.

El ex presidente de México por el Partido Acción Nacional (PAN) abogó por repensar el modelo de ciudad y tender hacia urbes “más compactas y conectadas”, en contraposición a los núcleos horizontales.

“Es muy difícil cambiar las ciudades ya construidas, pero en los próximos 15 años vendrán a vivir a ellas más de mil millones de personas, lo que equivale a construir un Washington o una Berlín cada mes durante 15 años”, dijo. EFE