La oposición consideró positiva la salida de Alfredo Castillo Cervantes como comisionado para la Seguridad en Michoacán, porque abre la oportunidad para reforzar la estrategia en esa entidad, pues los saldos hasta ahora son negativos y había perdido la efectividad que se buscaba.

El líder nacional del PRD, Carlos Navarrete, dijo que fue una buena decisión del gobierno federal dar por concluida la presencia de Alfredo Castillo, pues dejó de tener efectividad y se le complicaron las cosas con las autodefensas. “Su ciclo había concluido”, indicó el perredista, al plantear que el nuevo encargado, Felipe Gurrola, tiene como principal responsabilidad garantizar que los grupos armados no se desborden”.

El presidente nacional del PAN, Gustavo Madero, aseguró que significará el inicio de una nueva etapa de desarrollo integral para el estado, además de contribuir a generar confianza y certidumbre rumbo al proceso electoral del 7 de junio.

“Su salida era una demanda de diversas fuerzas políticas, así como de la población debido a su bajo desempeño, y ahora con esto se abre una oportunidad para reforzar la estrategia de seguridad”, dijo.

Silvano Aureoles (PRD), presidente de la Cámara de Diputados y precandidato al gobierno michoacano, aseguró que es una oportunidad para fortalecer las instituciones y evitar “figuras de gobiernos paralelos que sólo podrían entorpecer la buena marcha de la entidad”.

Enrique Burgos (PRI), presidente de la Comisión de Gobernación en el Senado, consideró que se requiere que ningún factor, ajeno a los candidatos y partidos políticos, influya en la decisión del electorado. Con información de Suzette Alcántara, Carina García, Horacio Jiménez, Juan Arvizu y Francisco Nieto