Amnistía Internacional evaluó el primer año del gobierno de Enrique Peña Nieto y aseguró que en este lapso la situación de los derechos humanos en el país es trágica y está lejos de mejorar.

Señaló que ninguna de las acciones de la actual administración como la publicación de la Ley General de Víctimas y la Unidad Especializada en Búsqueda de Personas Desaparecidas han tenido un impacto real, puesto que las víctimas siguen en el abandono por parte de las autoridades.

"Uno de los compromisos realizados hace un año por Peña Nieto fue el de poner fin a la epidemia de violencia y abusos contra los derechos humanos que caracterizó a la gestión de Felipe Calderón. Sin embargo, durante su primer año de gestión, los graves abusos tales como desapariciones forzadas, feminicidios, abusos contra personas migrantes y ataques contra personas defensores de derechos humanos y periodistas han continuado, amparados por la impunidad. Al mismo tiempo los casos de brutalidad policial contra manifestantes y las detenciones arbitrarias han ido en aumento", destacó la organización con sede en Londres.

En un pronunciamiento público, AI que se mantiene la fallida estrategia de seguridad, por lo que se mantienen las numerosas violaciones a los derechos humanos.

"Poner fin a los graves abusos a los derechos humanos y a la escandalosa impunidad para quienes los cometen requiere un liderazgo fuerte, voluntad política, acciones coordinadas, recursos adecuados y un dialogo efectivo con la sociedad civil. Estos elementos han estado evidentemente ausentes de la agenda política", manifestó Perseo Quiroz, director ejecutivo de Amnistía Internacional en México.

cg