CHICAGO (Notimex).— La comunidad mexicana de Chicago saldrá hoy a las calles para reclamar una reforma integral migratoria a Barack Obama, con motivo del evento inaugural de su segundo periodo como presidente de Estados Unidos.

Junto con inmigrantes procedentes de distintas naciones que residen en la región de Chicago, los connacionales indocumentados y simpatizantes realizarán una marcha-mitin en el centro de la ciudad.

“Reclamamos la reforma migratoria que nuevamente Obama prometió a cambio del voto latino. Pero como un paso esencial e inmediato pedimos un alto a las deportaciones que se siguen registrando”, expresó el sacerdote José Landaverde.

El reverendo encabeza uno de los diferentes grupos que se manifestarán el día de hoy .

Los inmigrantes y sus simpatizantes tenían previsto reunirse en la Plaza Daley y de ahí caminar hasta la Plaza Federal donde se desarrollará el mitin, en el cual se prevé participen víctimas de la deportación exponiendo su testimonio. Ayer, integrantes de diversos grupos proinmigrantes que organizan la marcha-mitin se reunieron para preparar pancartas y carteles, con frases que reclaman por la separaciones de familias, como “No a un segundo mandato de mentiras, promesas y más deportaciones”.

Como parte de la movilización, se prevé la entrega de una carta a los senadores federales por Illinois, el demócrata Richard Durbin y el republicano Mark Kirk, para exigirles su decidida participación en la definición de la reforma inmigratoria.

Además, pedirán su intervención a fin de finalizar en el estado las redadas y deportaciones.

“Mientras el Congreso delibera sobre la reforma, el presidente puede usar su autoridad ejecutiva para hacer cambios inmediatos para revertir su alto registro de deportaciones”, refirió Landaverde.

Deportaciones, un problema

“El primer mandato de Obama se vio empañado por 1.5 millones de personas deportadas, 409 mil en el último año”, dijo.

Explicó que si bien Obama anunció la intención de impulsar, “ahora sí”, una reforma migratoria, el área de Chicago ha sido testigo de un aumento en redadas y deportaciones.

“Una semana después de la reelección del presidente, el Servicio de Migración realizó redadas inauditas en una fábrica del área”, expresó el religioso del templo Misión de Nuestra Señora de Guadalupe, en el vecindario mexicano La Villita.

“No tiene sentido sacar a la gente del país que dice que quiere legalizar. Durante los últimos cuatro años, mi iglesia se ha llenado de niños que lloran cuyos padres han sido deportados”, apuntó.

“Chicago quiere a Obama en el lado correcto de la historia, y en su segundo mandato se definirá su legado”, consideró Eric Rodríguez, director de la Unión Latina de Chicago, organización participante en el reclamo colectivo que habrá desde esta ciudad.

“¿Va a ser el presidente que deporta a más personas que cualquier otro en la historia o el responsable de la defensa de la inclusión y la igualdad?”, indicó.