Homenaje a Pinochet causa enojo
SANTIAGO. Carabineros detuvieron a manifestantes en las inmediaciones del teatro Caupolicán, donde se transmitía un documental sobre Pinochet . (Foto: FELIPE TRUEBAEFE )
SANTIAGO (Agencias).— Una escasa asistencia de público y violencia en las calles marcaron ayer en la capital chilena un homenaje al fallecido dictador Augusto Pinochet, en una jornada que culminó con al menos 16 heridos, 25 detenidos y cuantiosos daños materiales, según diversas fuentes.
Un contingente policial reprimió violentamente a centenares de familiares de víctimas del régimen militar que intentaron acercarse a un teatro donde simpatizantes de Pinochet
homenajearon al ex dictador con la proyección de un documental que lleva su nombre y que, según los organizadores, muestra “la verdad” sobre la figura y obra de quien consideran el mejor presidente en la historia de Chile.
“Esta es una muy mala señal para la democracia, siento que el pinochetismo está dando la mejor cara de lo que realmente son, no tienen ningún grado de arrepentimiento”, dijo Mireya García, vicepresidenta de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos, cuyo hermano es un desaparecido.
Mientras unos mil 500 pinochetistas partidarios de Pinochet disfrutaban tranquilamente del acto en el interior del teatro Caupolicán, a unas dos cuadras un fuerte contingente policial dispersó con gruesos chorros de agua y gran cantidad de gases lacrimógenos a uno dos mil detractores de la dictadura.
“No se puede homenajear a quien asesinó, torturó e hizo desaparecer personas. Yo misma fui detenida y torturada... y mi hermano fue asesinado”, dijo Yolanda Contreras, de la Agrupación de Ejecutados Políticos, mientras salía de los chorros de agua.
El homenaje a Pinochet, el mayor desde su muerte en 2006, se dio en el marco de una fuerte controversia previa sobre la libertad de expresión. Mientras el gobierno adujo que no se podía impedir el acto porque se realizó en un recinto cerrado, los opositores destacaron que el homenaje eran tn inaceptable como si en Alemania se ensalzara a Hitler.
El vocero de gobierno, ministro Andrés Chadwick, declaró ante a la televisión estatal su arrepentimiento por haber formado parte de un régimen que violó los derechos humanos.
Entre los manifestantes hubo grupos de encapuchados que se dedicaron a destruir bienes urbanos, a agredir a transeúntes y a la policía y que también causaron graves destrozos en un local de venta de automóviles y en los propios vehículos en exhibición.