MILÁN (Agencias).— El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, compareció ayer ante un tribunal por primera vez en casi ocho años, mientras afronta una severa caída en sus niveles de popularidad, aunque a las afueras del tribunal cientos de seguidores lo aclamaron.

Berlusconi encarará además acusaciones en cuatro juicios por separado en las próximas semanas, incluyendo un cargo por supuestamente haber tenido sexo con una prostituta menor de edad.

La audiencia de ayer por un supuesto fraude durante la adquisición de derechos de emisión de televisión, estuvo cerrada a la prensa y el público y se pospuso hasta el 4 de abril después de apenas dos horas de haber comenzado.

“Todo salió bien. Estaré ahí para la próxima audiencia”, afirmó a periodistas y a decenas de seguidores reunidos afuera del Tribunal de Milán.

Antes de irse, subió sobre el estribo del automóvil que lo transportaba para saludar a sus “fans”, lo que causó el terror de sus guardaespaldas, que le pusieron un chaleco antibalas. Según el diario Il Fatto Quotidiano, 49 personas se dieron cita ante el tribunal cuando llegó el primer ministro a la audiencia y, en total, unos 100 de sus seguidores le aplaudieron al final y ondearon banderas y carteles en defensa del primer ministro.

Fuentes judiciales confirmaron que las próximas audiencia serán el 4 de abril y el 2 y el 30 de mayo. Dijeron que Berlusconi no dio ninguna declaración a los jueces y que saludó de mano a sus acusadores, los fiscales Fabio De Pasquale y Sergio Spadaro. “El primer ministro estaba tranquilo, la atmósfera era serena”, aseguró su abogado.

Los fiscales consideran que Berlusconi cometió fraude fiscal al vender los derechos de filmación de su emporio televisivo Mediaset. “Los fiscales han demostrado que desean enjuiciarme y que no se detienen ni incluso ante los hechos y el ridículo”, dijo el lunes el primer ministro en uno de los canales de televisión de su imperio Mediaset.

Berlusconi agregó que el fiscal lo considera un “enemigo ideológico y político” y como “un obstáculo que impide a la izquierda llegar al poder”. “Desgraciadamente, el comunismo en Italia nunca se rindió y nunca cambió”, agregó Berlusconi.

“Soy el hombre más acusado del universo y de la historia”, agregó el premier.

La última vez que el multimillonario de 74 años y empresario mediático compareció ante una corte fue en junio de 2003.

En tanto, Berlusconi se colocó un año más como el político más rico de Italia al declarar en 2010 un patrimonio por valor de 40.9 millones euros, casi el doble que en 2009. El dato aparece en la lista de declaración de la renta, divulgada ayer, que deben hacer pública parlamentarios y miembros del gobierno de Italia.