BANGKOK (Agencias).— Al menos 27 personas murieron ayer en Myanmar y una en la zona norte de Tailandia, a causa del sismo de 6.8 grados de magnitud en la escala de Richter con epicentro en el noreste de Myanmar, que afectó también los rascacielos de la capital tailandesa, Bangkok.

El gobernador de la provincia tailandesa de Chiang Mai, Somchai Hatayatanti, indicó al canal estatal de televisión que una mujer de 55 años murió por la heridas sufridas a raíz de que le cayera encima una pared de su casa mientras dormía.

La fuerte sacudida causó temor y una avería temporal de la red de alumbrado en la localidad de Mae Sai, situada en la frontera con Myanmar.

El servicio geológico de Estados Unidos situó el epicentro a 10 kilómetros de profundidad y a 82 kilómetros al norte de Chiang Mai, que es la principal ciudad de la región septentrional de Tailandia y uno de los principales destinos turísticos del país.

El sismo ha tenido lugar en una zona remota, montañosa, poco habitada y que forma parte del llamado Triángulo de Oro de la droga, donde convergen las fronteras de Birmania, Laos y Tailandia.

“En mis 40 años, nunca sentí un terremoto así. Un vaso se rompió y tuve que sostenerme de una columna”, dijo Thanawan Sisukniyom, una maestra retirada en Mai Sai.

Testigos en Chiang Mai, la segunda mayor ciudad del país, no reportaron daños inmediatos, pero indicaron que el sismo se había sentido con mucha fuerza.

Las autoridades birmanas, país donde los medios de comunicación están todos controlados por el ministerio de Información, informaron de los 27 muertos ayer por la noche. Un testigo en la ciudad de Tachilek en Myanmar, fronteriza con Chiang Rai, indicó que las moticicletas aparcadas cayeron al piso y se vieron grietas en la ruta.

El pasado día 10, 25 personas murieron y 250 resultaron heridas en otro sismo de 5.8 grados que sacudió la frontera de China con Myanmar.