COPIAPÓ, Chile (Agencias).— En su primer contacto oficial con la prensa, siete de los 33 mineros rescatados desde el yacimiento San José en Chile expresaron ayer su molestia debido al intenso acoso mediático y pidieron respeto.

Claudio Yáñez, Juan Carlos Aguilera, Daniel Herrera, Álex Vega, Darío Segovia, Luis Urzúa y Juan Illanes se reunieron con la prensa tras realizar unos controles médicos en las dependencias de la Asociación Chilena de Seguridad (ACHS) de Copiapó.

Illanes, quien actuó como vocero del grupo ante los micrófonos, señaló que estaban sorprendidos por el interés generado por su rescate y, al momento de pedir respeto, defendieron principalmente al minero Jhonny Barrios, cuyo triángulo amoroso con su esposa Marta Salinas y su actual pareja, Susana Valenzuela, ha sido explotado por los medios.

“Pido respeto y que nos dejen el espacio suficiente para aprender cómo enfrentarnos a ustedes”, subrayó Illanes, quien llamó en particular a expresar la privacidad de todos ellos,

El vocero del grupo reconoció el pacto de silencio que hizo el grupo sobre la experiencia vivida durante los 70 días que estuvieron encerrados a 700 metros bajo tierra, con la finalidad de escribir un libro, entre otras cosas. “Hemos pensado también en algo relacionado con la capacitación laboral para todos los que quieran acceder a la actividad minera y no tengan los medios para poder capacitarlos y entregarles un arma mejor”, agregó.

En todo caso, Víctor Segovia, quien llevaba una bitácora diaria durante su tiempo atrapado, y en la que se basaría el libro, dijo que aún no ha decidido qué hacer. Se dice que ha recibido jugosas ofertas por su diario.

En una entrevista con Reuter Televisión, Segovia dio algunos detalles de su vida en la mina. “Había problemas, como en toda familia, mucho tiempo juntos, peleas, pero nada grave”. Luego dijo: “Lo bueno de afuera es que si uno tiene pesadillas y se despierta, se da cuenta que está afuera, pero adentro uno tenía sueño y despertaba en la pesadilla”.

El diario local La Tercera publicó ayer fotos hasta ahora inéditas de las maniobras de rescate al interior de la mina que muestran a los socorristas revisando a los trabajadores encerrados en una caverna oscura y rocosa.

Ayer fue dado de alta Mario Sepúlveda, el “bromista”, quien, según el médico director de la ACHS de la región de Atacama, Jorge Díaz, presenta “un cuadro vertiginoso que probablemente tuvo su origen en un tema tensional derivado de la salida, al ser requerido por muchos periodistas”. Ya sólo permanece internado el minero Víctor Zamora debido a una lesión traumática de sus dientes que le provoca mucha incomodidad para comunicarse.

Díaz insistió en que los mineros pueden presentar algunos síntomas de estrés por la situación vivida, mientras vuelven a su rutina normal. “Pueden tener alteraciones en la calidad del sueño y de retomar sus actividades normales, por lo que el equipo de salud mental del Hospital del Trabajador los ayudará a llevar una vida normal”, explicó Díaz.

Los 33 mineros serán acompañados por un equipo sicológico que los ayude a dejar atrás los 70 días que estuvieron atrapados. Uno de los mineros, José Henríquez, regresó ayer, junto a sus familiares, al yacimiento San José para recoger sus cosas que permanecían en su casillero.

Henríquez, “el pastor”, quien fue el guía espiritual de los “33 de Atacama”, volvió al lugar del siniestro, según indicó su hermano Gastón, “para palpar de más cerca, después de todo este proceso, todo lo que vivimos acá y para estar en paz; a la vez le estamos dando las gracias a Dios”.