WASHINGTON.— Estados Unidos y la Organización de las Naciones Unidas (ONU) condenaron ayer los actos de represión y la muerte de manifestantes que participaron en los actos de apoyo en favor del retorno del depuesto presidente Manuel Zelaya en Honduras, al tiempo que instaron al gobierno de facto de Roberto Micheletti a permitir el retorno inmediato de quien ha sido “electo democráticamente” por el pueblo.

“Deploramos el uso de la fuerza contra manifestantes en Tegucigalpa”, aseguró el portavoz del Departamento de Estado, Ian Kelly, en relación al tiroteo ocurrido el domingo frente al aeropuerto Toncontín.

“Una vez más llamamos al régimen de facto y a todos los actores en Honduras a contenerse de todo acto de violencia”, agregó.

Desde Ginebra, el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, se declaró “entristecido y consternado por la pérdida de vidas humanas” y subrayó que “todo cambio inconstitucional de poder es inaceptable”.

Tras el fallido intento de Zelaya por retornar a Tegucigalpa, el Departamento de Estado confirmaba además que el depuesto presidente regresará hoy martes a Washington con la intención de entrevistarse con la secretaria de Estado, Hillary Clinton.

“Estoy seguro de que nos reuniremos con él a un alto nivel”, aseguró Kelly sin confirmar o desmentir una entrevista con Clinton que colaboradores cercanos al presidente Zelaya han anticipado a varios medios.

“Regresaré”

Desde Managua, donde pasó la noche del domingo, Zelaya confirmó que anoche viajaría a Washington y que hoy tenía previsto reunirse con Clinton.

Zelaya habló a periodistas en Managua, y dijo que volverá a intentar entrar a su país, pese al intento fallido del domingo. “Ayer hice los intentos. Lógicamente mi error fue avisarles, porque me pusieron retenes, al Ejército, francotiradores y empezaron a asesinar gente. Ahora no voy a avisar”, indicó.

En conferencia de prensa antes de salir a EU, Zelaya expresó su esperanza de que su encuentro con Clinton derive en un claro respaldo a las resoluciones de la OEA y la ONU que exigen su inmediata restitución en la Presidencia de su país.

No los recibirán

En este marco, el Departamento de Estado rechazó la posibilidad de recibir hoy a una delegación del gobierno de Micheletti que viajó ayer para intentar entablar un diálogo con la Casa Blanca.

“Estamos hablando de un régimen que Estados Unidos no reconoce y por eso no podríamos recibirlos”, aseguró Kelly al poner, además, en entredicho las credenciales del embajador de Honduras ante Estados Unidos, Roberto Flores, quien se ha declarado un leal de Micheletti.

“No estoy muy seguro que el señor Flores siga siendo embajador”, indicó Kelly, al señalar que sería muy complicado que alguien que dice representar a un gobierno que no es reconocido por EU pueda ostentar representación alguna ante la Casa Blanca y el Departamento de Estado.

Con todo, Micheletti, espera que Clinton le diga a Zelaya, que debe rendir cuentas por sus “actos ilegales”.

Al mismo tiempo, el secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, respondía ayer a las primeras señales de diálogo y moderación que ha lanzado el gobierno hondureño de facto.

“Estamos dispuestos a proseguir todas las gestiones diplomáticas que correspondan para obtener el objetivo que no es otro que restablecer en el cargo al presidente Zelaya”, dijo Insulza.

Cambian estrategia

El gobierno interino de Honduras cerró el aeropuerto ayer por dos días para impedir la llegada de Zelaya. Los militares colocaron camiones a los extremos de la pista principal y un avión en el medio para impedir el aterrizaje de cualquier aeronave. A su vez, los seguidores de Manuel Zelaya marcharon una vez más hacia el aeropuerto de Toncontín, donde se agruparon para esperar al expulsado gobernante.

Sin embargo, para hoy anunciaron un cambio de estrategia, dijo Rafael Alegría, del Frente Nacional de Resistencia contra el golpe de Estado. Explicó que su grupo decidió realizar menos concentraciones en la capital y se han girado “instrucciones para que se hagan tomas de carreteras, bloqueo de transporte de combustible y mercaderías, y cierre de fronteras, entre otros”.

Las manifestaciones callejeras han dejado un muerto y más de 30 heridos. Al respecto, el canciller de Micheletti, Enrique Ortez, declaró a los medios extranjeros que hubo dos muertos en los incidentes y negó que la policía o los militares hubiesen disparado en contra de los manifestantes.

“No hay ninguna responsabilidad de las fuerzas de seguridad” en los hechos, enfatizó Ortez. A pesar de lo dicho por el canciller, la fiscal de Derechos Humanos del Ministerio Público, Sandra Ponce, declaró a la prensa que “no está confirmado en forma absoluta” que haya muerto una segunda persona. Tampoco los organizadores de las movilizaciones en favor de Zelaya han denunciado el segundo muerto.

La Cancillería emitió un comunicado en que informó que protestará ante Venezuela porque uno de sus aviones en que viajaba Zelaya violó espacio aéreo hondureño. (Con información de agencias)