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ROMA.— El Consejo de Ministros del gobierno italiano, presidido por Mario Monti, aprobó ayer el primer ajuste presupuestario del ejecutivo de tecnócratas y que hoy será explicado por el ex comisario en el Parlamento, informaron fuentes gubernamentales.

El primer ministro Mario Monti aceleró los planes para aprobar un paquete de medidas de austeridad por 20 mil millones de euros destinadas a reforzar las difíciles finanzas italianas y frenar una crisis que amenaza con superar a la zona euro.

Las esperadas medidas incluyen elevar la edad de jubilación de trabajadores, liberalizar los servicios profesionales, aumentar el impuesto a la renta y aplicar nuevos aranceles en los activos privados y el sector inmobiliario.

Italia, con una deuda pública que asciende a casi 120% de su PBI, ha estado en el centro de la crisis europea desde que el rendimiento de sus bonos a 10 años se disparó a 7%, un nivel que forzó a países como Grecia e Irlanda a pedir un rescate.

La adopción del paquete es considerado vital para restablecer la deteriorada credibilidad de Italia en los mercados financieros después de una serie de promesas incumplidas por el gobierno de centroderecha del ex primer ministro Silvio Berlusconi.

Los sindicatos dijeron que los recortes en el gasto afectaría a los trabajadores y pensionados más pobres.

La opción no está entre implementar un paquete liviano y uno severo, sino entre un paquete severo hoy y el riesgo de bancarrota para el país mañana, dijo Angelino Alfano, secretario del partido de centro-derecha PDL, al canal de televisión SkyTG24.

Con Italia, la tercera economía de la zona euro, cerca a una crisis económica que podría destruir las defensas financieras de Europa, los líderes de la UE se reunirán en Bruselas esta semana con la esperanza de acordar medidas para inclinar al bloque hacia normas fiscales más severas. Fuentes presentes en las discusiones sobre las nuevas medidas fiscales dijeron que el monto de las mismas ascendería a casi 20 mil millones de euros (27 mil millones de dólares).

Un monto adicional de casi 4 mil millones de euros provendría de los recortes automáticos de las exoneraciones de impuestos y medidas de asistencia social. Monti tendrá que equilibrar la necesidad de implementar un rigor presupuestario sin obstruir el crecimiento de Italia. (Con información de Reuters y EFE)