david.aguilar@eluniversal.com.mx

Ariel Sánchez Zermeño, director general de Lonai, fue exonerado por un juez de la ciudad de México por el delito de fraude. En entrevista con EL UNIVERSAL, detalló que el auto de formal prisión que le dictó un juez en agosto de este año se debió a una demanda que un cliente hizo ante juzgados penales y no mercantiles para dirimir la disputa.

“Fue un caso con una señora que nos canceló la compra de su departamento y que de acuerdo a los contratos se pactó la devolución de su dinero. Esto fue hace tres años; en ese lapso nunca pasó a recoger el cheque por 250 mil pesos que le tuvimos listo y un día nos llegó el aviso de la demanda. Pasaron los meses y reapareció exigiendo el doble del monto por daños y perjuicios y ahí sí ya no nos pusimos de acuerdo”, relató en un restaurante situado en los alrededores del World Trade Center de la ciudad de México.

La semana pasada llegó a EL UNIVERSAL un correo electrónico enviado por una persona que se identificó como “Justo Veraz”. Ahí dio a conocer que Ariel Sánchez estaba preso, por el delito de fraude gravoso, en el Reclusorio Oriente de la ciudad de México.

Se buscó a personal de la Cámara Nacional de la Industria de Desarrollo y Promoción de la Vivienda, delegación Valle de México (Canadevi VM) en el DF para verificar la información.

El director de esa asociación civil, Manuel González, negó que Ariel Sánchez estuviese preso y aseguró que se encontraba de vacaciones; sin embargo, en la misma llamada terminó por reconocer la situación y entonces dijo que Sánchez ya había renunciado a su cargo como presidente para enfrentar el proceso legal en su contra. Esto tampoco fue cierto.

Ariel Sánchez dijo también que luego de pasar por esta situación no renunciará a su cargo y se apegará a los estatutos del organismo para retomar su trabajo.