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La cartera vencida de los bancos mexicanos sigue en ascenso. Al cierre de 2008 este indicador reportó un aumento de 40%, para totalizar en 60 mil 724 millones de pesos, informó la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).

Esta cifra es la más alta de los últimos cinco años. El mayor deterioro se observa en consumo, en especial, de tarjetas de crédito.

La CNBV recalcó que se trabaja con los intermediarios para reducir la morosidad, ya que esa es una de las principales preocupaciones de la autoridad.

Puntualizó que las utilidades de las entidades mostraron una disminución de 32.15% respecto a 2007, para sumar 53 mil 756 millones de pesos.

A su vez, la cartera de crédito total, incluyendo las Sociedades Financieras de Objeto Múltiple (Sofom), entidades reguladas que se crearon para administrar la mayor parte de los negocios de tarjetas de crédito de algunos bancos, tuvo un crecimiento anual de 11.36%, con un saldo a diciembre de 2008 de 1.8 billones de pesos.

La CNBV puntualizó que la cartera vigente observó un incremento anual de 10.59%.

De la cartera total, 46.24% se destinó a la actividad empresarial o comercial; 24.80% al consumo; 16.22% a la vivienda; 4.40% a los créditos a entidades financieras y 8.33% restante a entidades gubernamentales.

Los activos totales del sector crecieron 16.41% con respecto a la cifra que se reportó en diciembre de 2007.

Por su parte, las inversiones en valores presentaron un decremento anual de 2.24% y su saldo al final del cuarto trimestre de 2008 ascendió a 1.5 billones de pesos.

Enrique Castillo Sánchez Mejorada, presidente de la Asociación de Bancos de México (ABM), reconoció que el mayor sobreendeudamiento se explica porque se atendieron segmentos de la población sin experiencia crediticia.

Respecto a la propuesta de topar comisiones y tasas de interés comentó que el gremio continuará negociando con los legisladores, a fin de explicarles las consecuencias negativas que tendría fijar topes en las tasas.

Entrevistado luego de clausurar el Congreso Universitario, insistió en que poner límite a los réditos reducirá la oferta de financiamiento de la banca comercial.