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La desaceleración que sufre la industria de la construcción provocó el despido de 58 mil 658 trabajadores en todo el sector durante los primeros tres meses del año, según dio a conocer la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC).

La Gerencia de Economía y Financiamiento del organismo empresarial prevé además, que la actividad de la construcción continuará deprimida hasta el primer semestre del año, lo cual podría costarle al país 100 mil nuevos puestos de trabajo que dejarían de generarse.

En su carpeta de Información Estadística del Sector de la Construcción, con fecha de 13 de mayo, el organismo empresarial señala que en 2012 el empleo generado por el sector ascendió a 5 millones 865 mil 773 puestos de trabajo.

Se estima para este año mantener un nivel de ocupación de 6 millón 15 mil 773 personas. La CMIC argumenta que es probable que el repunte inicie hasta agosto, una vez que la actual administración exponga sus planes de largo plazo y estrategias para realizar reformas estructurales.

“Prevemos que la industria de la construcción comience a repuntar a partir de agosto del presente año y cierre el año con un crecimiento de 2.0% al finalizar el ejercicio”.

De hecho, el organismo empresarial aseguró que la inversión privada se ha mantenido a la expectativa de los alcances del Programa Nacional de Infraestructura 2013-2018.

“Esperamos que a partir del segundo trimestre del año se inicie con el anuncio de licitaciones de obras importantes para impulsar nuevamente el crecimiento”, indicó.

Señaló que el inicio de 2013 marca una desaceleración en la actividad del sector. Marzo refleja una caída de 5.2% y el acumulado del año es de -2.3%. “Es el tercer peor inicio de trimestre en la última década después de la crisis de 2009 y 2010”, añade.

Por ello, los pronósticos de crecimiento para este año se han ajustado a la baja, “porque la actual administración se ha tardado en anunciar el Plan Nacional de Infraestuctura y ha retrasado el programa de licitaciones de obra pública”.

“Y, por el grave problema de liquidez que enfrentan los desarrolladores de vivienda, lo un ha mermado la actividad de la construcción en este inicio de año”, plantea la cámara.

El organismo, que aglutina a poco más de 10 mil empresas de la construcción, consideró que es necesario implementar de manera apremiante los mecanismos necesarios para que el ejercicio de la inversión pública en 2013 fluya.

“Por tal motivo, frenar, retrasar o reducir la inversión pública, sólo servirá para alejar la meta que en materia de infraestructura que nos hemos fijado (colocar a México en las primeras 25 economías a nivel mundial)”, añade.

Explicó que el desarrollo de infraestructura marcará el dinamismo del sector construcción a mediano plazo y por eso se debe realizar el máximo esfuerzo para mantener la inversión pública.