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La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) redujo su pronóstico de crecimiento económico de 3.9 a 2.7% para 2014, como consecuencia del débil desempeño que mostró la actividad productiva en el primer trimestre.

Este nuevo horizonte dado a conocer por la dependencia se ubicó como uno de los más moderados, pues hasta el momento, el consenso de analistas estima que la expansión del Producto Interno Bruto (PIB) será de 3% para el presente año.

De concretarse la expectativa de 2.7% en 2014, aunado a que el PIB creció 1.1% el año pasado, la expansión promedio en los dos primeros años de la actual administración es de solo 1.9%, cifra por debajo de la tendencia observada en las últimas tres décadas.

“El 2.7% es un crecimiento insuficiente, es menos que el que se merece México y es menos del potencial que tenemos”, reconoció el subsecretario de Hacienda, Fernando Aportela al dar a conocer la modificación del pronóstico del PIB.

En conferencia de prensa, el funcionario reconoció que dos factores que influyeron negativamente en la economía mexicana fueron el mal clima en Estados Unidos, así como el impacto adverso de la Reforma Hacendaria sobre el consumo y la inversión privada.

Detalló que el PIB estadounidense avanzó a una tasa anual de 0.1% en el primer trimestre, en gran medida por un invierno atípicamente desfavorable.

Respecto a la Reforma Hacendaria, dijo que el menor consumo se observó en productos afectados por los nuevos impuestos, como el carbono, las bebidas saborizadas y alimentos no básicos con alta densidad calórica.

Un tercer factor que también restó dinamismo a la economía fue la caída de 1.3% en el PIB de la actividad petrolera, principalmente por la menor plataforma de producción que reportó Petróleos Mexicanos en el primer trimestre.

Aunque Aportela reconoció que el crecimiento de la economía mexicana fue insatisfactorio, afirmó que fue de las pocas naciones, pertenecientes a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), que tuvo cifras positivas en el primer trimestre en comparación con el periodo octubre-diciembre de 2013.

Dijo que México, Japón, Alemania y el Reino Unidos fueron los únicos, entre los 34 países pertenecientes de la OCDE, que tuvieron un crecimiento en su PIB trimestral.

El titular de la Unidad de Planeación Económica de la SHCP, Ernesto Revilla, aseguró que aunque se espera un menor dinamismo en el PIB de 2014 eso no implicará cambios en las finanzas públicas, ni por el lado de ingreso, gasto o el déficit fiscal.

“No vemos la necesidad de cambiar las expectativas de finanzas públicas, seguiremos observando la evolución de los ingresos y del gasto, y la meta del déficit se mantiene como lo aprobó el Congreso de la Unión”, precisó.

El subsecretario de Hacienda afirmó que varios aspectos que detuvieron el crecimiento de la actividad económica en el primer trimestre fueron de carácter temporal, por lo que las perspectivas son más favorables en lo que resta del año.

Destacó que indicadores como la inflación, el empleo, las remesas y la confianza del consumidor ya dan señales de mejoría, mientras que el consumo y la inversión también evolucionarán positivamente, una vez que se disipen los efectos de la Reforma Hacendaria.

Oleada de correcciones

La decisión de Hacienda, de reducir el pronóstico del PIB para 2014 resultó sorpresivo, lo cual puede originar que varias instituciones financieras revisen su actual perspectiva económica y de generación de empleos.

Para el director del Instituto para el Desarrollo Industrial y Crecimiento Económico, José Luis de la Cruz, el modesto crecimiento del PIB nacional implicará dejar de generar 150 mil empleos formales este año.

Por su parte, el subdirector de análisis económico de Vector Casa de Bolsa, Luis Adrián Muñiz, estimó que la Reforma Hacendaria le restó 0.2 puntos porcentuales al crecimiento del PIB en estos primeros meses del año.

Por ello, consideró positivo que la SHCP, a partir del reconocimiento de la afectación de la Reforma Hacendaria, haya estimado un pronóstico “más realista”.

El analista económico, Jonathan Heath, aseguró que con el ajuste del PIB por parte de Hacienda se puede asegurar que la economía mexicana se encuentra estancada, aunque coincidió en que hacia delante se espera un mejor desempeño.

Al cuestionársele por qué el gasto público, pese a tener un sobreejercicio en el primer trimestre del año, no se reflejó en la actividad económica, respondió que una parte importante de ese rubro se destinó a programas sociales, que si bien son loables, no tienen un impacto sobre la economía.

Para el subdirector de análisis económico de Monex, Eduardo Ávila, lo más importante ahora es la recuperación, pues si se postergan las señales de una reactivación, la economía mexicana corre el riesgo de tener revisiones más inclinadas al rango inferior que pronosticó el Banco de México, de 2.3%.