juan.arvizu@eluniversal.com.mx

La caída de las expectativas de crecimiento económico abrió una confrontación de fuerzas políticas, en la que la oposición del Partido Acción Nacional (PAN) y el Partido de la Revolución Democrática (PRD) urgió dar marcha atrás a la Reforma Hacendaria y al endeudamiento federal, mientras que el Partido Revolucionario Institucional (PRI), por conducto de su presidente nacional, César Camacho, dijo que la baja en el PIB, “es la evidencia más elocuente de la urgencia de las reformas” pendientes en el Congreso.

El vice coordinador económico del PAN en el Senado, Francisco Búrquez Valenzuela, dijo que la Reforma Fiscal aplicada en año de recesión, ha generado caos en 2014, y “necesitamos que se tomen decisiones rápidas, como aplicar una contrarreforma fiscal para reducir los impuestos a las familias y a las empresas”, y que el gobierno deje de tomar crédito para que la economía productiva se financie.

Camacho Quiroz declaró que el ajuste en las expectativas económicas “da una señal urgente de contar con mejores instrumentos que ayuden a hacer descollar la economía mexicana”.

Por su parte, el presidente del PRD, Jesús Zambrano, declaró que el ajuste a la baja “demuestra una vez más el fracaso del modelo de desarrollo adoptados desde hace más de tres décadas por los gobiernos priístas y que fue refrendado por dos sexenios del panismo”.

María de los Ángeles Moreno, integrante del equipo económico en el gobierno de Carlos Salinas de Gortari, advirtió que el crecimiento económico deseable no es de dos puntos, sino de cinco o seis, y que absorba desempleo y subocupación.

El senador Miguel Barbosa, coordinador de la bancada del PRD, urgió un plan general para enfrentar el momento económico actual.

En la Cámara de Diputados, Ricardo Monreal de Movimiento Ciudadano lamentó que la tendencia sea a que la caída continúe, como efecto de que la Reforma Fiscal inhibió el crecimiento.