Casas de 36 metros cuadrados en completa integración con la naturaleza y fabricadas con los materiales de construcción más simples que existen forman parte de la divertida propuesta arquitectónica de la mexicana Frida Escobedo.

Para ella, diseñar y edificar va más allá de los cánones que marca cualquier estilo. "Hago sólo lo que me atrae, por pequeño que sea. Y considero que lo importante no es el resultado final, sino el proceso creativo, que sigue siendo lo más divertido y perdura mucho tiempo después de que se termina la obra", explica esta profesionista egresada de la Universidad Iberoamericana.

Según ella, el tamaño del espacio habitable no importa.

Así lo demuestra con una casa de 36 metros cuadrados ubicada en la carretera libre a Cuernavaca.

"La construí para una sola persona, un joven que deseaba vivir rodeado por la naturaleza.

"Lleva por nombre La casa negra, y fue concebida con total libertad", describe la arquitecta Escobedo.

Está montada sobre cuatro tubos que la sostienen, de forma que se eleva sobre el terreno. Los interiores alojan todos los servicios: cocina, baño y sala comedor.

"El color negro de la estructura, hecha de block (ladrillo grande), se plasmó gracias a que el dueño del espacio quería sentirse como dentro de una cámara fotográfica y, para complementar la idea, se instaló un gran ventanal para tener una vista completa de la ciudad de México", explica la creativa.

La casa tiene una rampa por medio de la cual se sube a la terraza donde se encuentra el pequeño tinaco para el agua, elaborado en acero inoxidable.

"Mi socio Alejandro Alarcón y yo buscamos siempre que la experiencia estética sea la protagonista de nuestras construcciones. La forma y la función deben estar resueltos, así que más vale hacerlos divertidos" nos explica la arquitecta.

Y afirma que cada quien tiene su forma de pensar la arquitectura;por lo mismo, todo es siempre nuevo y, a la vez, nunca lo es.

Una mujer en la arquitectura

En nuestro país y en general, en el mundo, son pocas la mujeres arquitectas, pero Frida no ha encontrado ninguna limitante para proyectar sus ideas.

"Apenas voy comenzando, dando los primeros pasos en la creación de espacios y creo que cada vez más, en éste y en todos los ámbitos, las mujeres se harán más presentes, y pronto llegará el punto en el que no nos preocupe el género sino el talento y el trabajo. Esa seria la verdadera equidad".

Expresa que la arquitectura en México se halla en completo desarrollo.

"Pienso que en general, los procesos de pensamiento y producción arquitectónicos se han acelerado enormemente, para ser eficientes en términos de costos, sobre todo a un año de las elecciones y de las crisis de fin de sexenio. Así que se deja de cuestionar su sentido o su esencia, se convierte en una arquitectura de moda o decorado que venda, es como un copypaste fashionista.

"Entonces, creo que lo interesante sería replantearse cómo insertarse en ese sistema de producción exprés y entenderla como una herramienta para crear arquitectura, no para "mejorar el mundo" de la manera como nos han dicho que debe de ser, sino por el puro gusto de crear".

Le preguntamos a nuestra entrevistada cómo observa el panorama de la arquitectura mundial.

"Creo que ésta debe tomar en cuenta el proceso arquitectónico, que es lo más importante; no la forma, el material ni la mano de obra.

"El objeto no será el fin, pero puede ser el resultado".

Actualmente Frida trabaja en la realización de unos módulos de atención ciudadana y mejoramiento urbano en la ciudad de México.