MADRID. Le debe su único Oscar por Million dollar baby, pero Morgan Freeman se permite bromear acerca del director Clint Eastwood, de quien dijo: “Probablemente sea la última vez que trabaje con él” .

“Es demasiado eficiente, demasiado rápido y tiene una visión demasiado clara de lo que quiere. Eastwood es demasiado perfecto para mí”, dijo el actor en Madrid durante la presentación en la capital española de Invictus.

La película es una historia sobre la reconciliación y el perdón centrada en la figura del ex presidente sudafricano Nelson Mandela.

Freeman, en la actualidad amigo personal de Mandela, rememoró la extraña situación que vivió cuando conoció personalmente al líder de la lucha contra el apartheid. “Me invitó a desayunar y fui con hambre, pero sólo había té”, contó la estrella. (EFE)