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Manuel Landeta sabe que nunca entenderá a las mujeres, por eso sólo trata de hacerles “el mejor homenaje” en la obra Divorciémonos mi amor, en la que caracteriza a una fémina.

“Ha sido muy divertido, porque las mujeres son muy complicadas. Las he observado mucho cómo se mueven, qué dicen y me cuesta trabajo porque es un arte de defensa personal... Hay un momento particular en la obra que debes ser creíble y tienes que generar un sentimiento en el público”, dijo el actor a EL UNIVERSAL.

Lo más complicado para el artista, confiesa, es voltear a ver a Alexis Ayala con deseo: “me tira el chon y el voltear a verlo con cara de ‘ay sí’, siendo hombre, es un paso gordo”.

La puesta en escena regresa al Distrito Federal después de dar algunas presentaciones en el interior de la República, esta ocasión en el Teatro Blanquita de la Ciudad de México.

La producción de Omar Suárez ya superó las 100 representaciones, y dará funciones los 5, 6, 7, 12, 13 y 14 de agosto, que combinará con algunas fechas en Estados Unidos. Landeta se presentó en la Catedral del teatro en México hace 21 años, con el musical ¡Qué plantón!, y hacer comedia en el recinto le provoca emociones varias que espera contener el día del reesteno del montaje en la capital.

“Estar en este teatro, con gran historia, donde estuvieron los grandes de la carpa, es un honor y compromiso. Además, estar en un escenario en la ciudad de México es maravilloso, porque el público de México es más complicado que el de la República”.

Listo para Spamalot

Inicialmente, Manuel audicionó y platicó con Alejandro Gou para hacer Gallahan en Spamalot, pero por sus compromisos con Divorciémonos mi amor no pudo tomar el papel, que actualmente hace el español Lisardo.

“Espero eventualmente poder hacerlo, pero me gustaría hacer dos papeles: Gallahan y Lancelot. Vi la puesta española y quiero ver la nuestra pronto, pero más hablar con Gou para actuar en ella”, explicó el actor.

Una asignatura en calidad de pendiente para el actor es la televisión, quien entre risas platica porque su ausencia de ella.

“No ha habido ofertas, yo sí me he acercado, pero no ha habido recepción alguna de ellos”.

En la carrera de Manuel Landeta el cine es poco, por lo que razona en su brillante cabeza.

“Es complicado meterte al mundo del cine, es un círculo muy cerrado. Son un poco extraños”, finalizó.

Insiste Omar con William Levy

Quien no quita el dedo del renglón es el productor Omar Suárez, ya que ratificó su deseo por tener a William Levy en una obra de teatro suya.

“Creo que tiene potencial como actor y en televisión no la ha sacado. Me gustaría para él un Tenesse Williams. que el haga al personaje masculino de Dulce pájaro de juventud. La mujer estaría en Ofelia Medina y empezaríamos con las lecturas en noviembre, cuando él regrese de Hollywood”, comentó el también responsable de Perfume de gardenias, puesta en escena donde también tiene algo que decir.

“Aracely (Arámbula) no se va, sigue con nosotros. Sabemos que tiene algunos compromisos y la buscan para hacer telenovela, pero ella está feliz con la obra y el público la pide”, aclaró.