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Editorial EL UNIVERSAL

Lecciones de narcomoralidad

Inspiración en el interés público, responsabilidad, búsqueda de la verdad, de permanente justicia y del cumplimiento de los derechos humano ...





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    16 de julio de 2009

    Lo que nos faltaba ver. Un llamado de los narcos para pedir al jefe del Estado mexicano que la PFP y la SIEDO no fabriquen más culpables, no se metan con sus familiares ni ataquen a personas inocentes. Proponen diálogo, negociación y consenso con el gobierno de la República. Piden guerra limpia y punto. El criminal que da clases de civismo a la autoridad. Ese es el papel asumido el día de ayer por Servando Gómez, mejor conocido como La Tuta, uno de los principales líderes de La Familia.

    Los cárteles mexicanos están mutando para convertirse en otra cosa. Ahora también trafican con armas, cobran impuestos privados a cambio de seguridad y hasta proveen de opciones espirituales para sus seguidores. Como organización buscan competir y ganarle su lugar al Estado y a otras instituciones de la sociedad.

    Sorprende su estrategia de comunicación. Según el señor Gómez, La Familia es respetuosa con el Presidente, con las Fuerzas Armadas y con la población en general. En cambio, tiene como enemigos jurados a los cuerpos policiacos.

    En 2006, el presidente Felipe Calderón fue el primero en utilizar el concepto de “guerra” para explicar públicamente el ataque a esta forma de criminalidad. Ahora esas mismas organizaciones delictivas exigen ser tratadas por el Estado como “ejército regular enemigo”, sujetas y protegidas por las convenciones internacionales y los principios civilizados mínimos de toda guerra: no a la tortura, no a las desapariciones, no a los asesinatos.

    ¿Qué ha sucedido durante los últimos años en México para que un nefasto delincuente se atreva a llamar a cuentas al gobierno nacional?

    La única forma que tiene el Estado mexicano para ganar esta guerra es demostrar la superioridad moral que le otorga el imperio de la ley y el respeto irreductible a los derechos humanos.



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