“¿Qué me dejó Cruz Azul? Una gran cicatriz en el rostro y que me tenga que amarrar las costillas, pero más que nada, la satisfacción de haber pertenecido a la mejor institución del futbol mexicano”.

El goleador histórico de los Cementeros es Carlos Hermosillo. El delantero, quien jugó para La Máquina de 1991 a 1998, obtuvo un título de Copa, en 1996-97, y de Liga, en el Invierno de 1997.

“Haber pertenecido a Cruz Azul fue muy grato. Y es que yo soy aficionado cementero desde pequeño. Me enamoré del equipo de Marín, Guillermo Mendizábal, Rodolfo Montoya, Eladio Vera, así que cuando llegué a Cruz Azul pues de inmediato me sentí en mi casa”, recuerda el ahora comentarista.

Carlos ganó tres títulos de goleo de forma consecutiva con La Máquina, pero por lo que más se le recuerda fue por anotar el gol del más reciente título cementero, el 7 de diciembre de 1997, en León.

“Quién iba a pensar que en esa Liguilla nos íbamos a coronar. En el primer juego de la semifinal (contra el Atlante), me fracturé una costilla y me operé. ¡Y las costillas no se operan!”.

Ya en la final se dio ese dramático juego. “Entro de cambio y se da esa jugada con Comizzo. No sabía que había pasado. Sólo recuerdo que El Ruso (Héctor Adomaitis) me dice: ‘¿Estás bien? verdad que lo puedes tirar’. Yo sólo me levanté y tiré el penalti. Mira... gané muchos títulos en mi carrera, con América, Guadalajara, Necaxa, y todos fueron especiales, pero este tuvo algo más especial, por todo lo que se vivió, y por la historia”, recuerda Hermosillo.

Ahora, Cruz Azul cumple 50 años en Primera División. Ese título de 1997 ha sido el más reciente de Liga y las críticas han caído en racimo contra el club.

“Creo que la directiva tiene que tomar decisiones más radicales. Se debe de buscar al jugador con el perfil que necesita al institución, no traer por traer”, opina el ex delantero.

La crisis de la falta de títulos, “le puede suceder a cualquier equipo. Sí, son muchos años en los que no se gana nada, y la última final que te la sacan en cuatro minutos, pues fue algo increíble, pero el estar peleando títulos cada temporada, no cualquiera”.

¿Y al final, qué le dejó Cruz Azul a Hermosillo? Muy fácil, lo convirtió en leyenda.