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GUADALAJARA.— Tuvo que ser el holandés Johan Cruyff quien llegara a poner solución. La crítica más grande que ha recibido el estadio Omnilife desde que abrió sus puertas, el 30 de julio de 2010, por fin será corregida: la casa de Chivas cambiará su pasto sintético por uno natural, a partir del próximo Torneo Apertura 2012.

Luego de 21 meses y medio de quejas por parte de los equipos visitantes e incluso lesiones entre los jugadores locales, la directiva rojiblanca anunció la decisión, tomada por recomendación del nuevo asesor del equipo.

Dicha determinación obedece, según el comunicado de la dirigencia, “al apoyo irrestricto que se le ha conferido [a Cruyff] en la reestructura del área de futbol, para implementar ese sello de excelencia dentro y fuera de la cancha, lo cual significará que el Guadalajara sea un protagonista permanente, no sólo en la Liga de México, sino a nivel mundial, como su historia y gran afición lo exigen”.

Johan Cruyyf aseguró que “en el futbol que queremos jugar, funciona bien, muy bien, el césped natural”. Además, dijo que para el cambio de superficie influyeron las opiniones de la gente y las críticas.

En la cancha sintética de séptima generación, según fuentes allegadas a la directiva, se invirtió alrededor de un millón de dólares. Sin embargo, la pérdida monetaria y el gasto subsecuente para equipar al estadio con su nueva cancha no será un impedimento.

“El moderno estadio Omnilife, el Templo Mayor de Chivas, considerado ya la obra más sobresaliente de su tipo en Latinoamérica, cambiará para el Apertura 2012 de superficie sintética a natural, decisión analizada por Cruyff y que fue avalada por Jorge Vergara y Angélica Fuentes, sin reparar en el gran costo económico que significará esta inversión”, añade el documento.

Más adelante, el comunicado reitera que el holandés es responsable de la modificación: “El pasto D Vision 60, [de la empresa] Desso Sport Systems, que actualmente cuenta el estadio Omnilife, el más avanzado en tecnología y avalado por la FIFA, será reemplazado por pasto natural, de acuerdo con lo indicado por Cruyff, demostrando de esta forma que Chivas buscará competir al más alto nivel, sumando todos los elementos con los cuales cuenta actualmente el futbol de élite”.

Quejas y pobres resultados

Desde la inauguración ante Manchester United, el césped sintético causó estragos. Javier Chicharito Hernández fue el primer anotador en la casa rojiblanca, pero aquel 30 de julio de 2010 se dio otro dato histórico: Omar Esparza se convirtió en el primer lesionado sobre el campo artificial.

Desde entonces, las críticas llovieron. “Las canchas sintéticas no son aptas para el futbol.... Esta cancha no sirve, perjudica a Chivas, porque es un equipo rápido, fuerte y táctico. El estadio está fabuloso, pero [el césped] le perjudica más al local que al visitante”, dijo Tomás Boy, ex técnico del Morelia.

“Jugar en una cancha así, siempre es muy difícil, te duele la espalda, también los tobillos y las rodillas”, sentenció Rafael Márquez, tras un partido amistoso con el Red Bull de Nueva York.

El técnico del América, Miguel Herrera, vertió duras críticas. “Es uno de los estadios más bonitos de México, pero se equivocaron en la cancha”.