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MORELIA.— Enrique Meza se siente avergonzado, luego de la trifulca sucedida en la cancha del estadio Morelos, momentos después de recibir el tercer gol de Monarcas que selló la eliminación de Cruz Azul.

El Ojitos describe la bronca como un acto de “bandoleros”.

“Me deja vergüenza, porque dimos un papelazo al final, no sé de quién fue la culpa, pero nunca tenemos que comportarnos así”, describe el técnico de La Máquina. “Tengo mucho dolor y vergüenza, nos comportamos como bandoleros. No es de deportistas esto que pasó”.

Christian Giménez, otro de los involucrados en el desmán ocurrido en el coso de Morelia, excusa que los golpes que recetó al aficionado que se saltó al terreno de juego fue por la adrenalina que se sentía en la agonía del encuentro y a la “calentura”.

“No sé qué fue lo que le dijo este aficionado a [Gerardo] Torrado, no tuve que reaccionar así, pero por la adrenalina, me calenté y esto sucedió”, cuenta el atacante argentino.

Horacio Cervantes va directo contra Tomás Boy y lo denuncia como uno de los incitadores de la bronca. El zaguero cementero explica que el estratega de Morelia fue a burlarse de ellos en el festejo del tercer tanto.

“El señor Boy parece que se burló, no estamos seguros, pero eso pareció y de ahí empezó todo este caos que terminó con lo del aficionado en la cancha”, reclama el central.

Misma versión de los hechos la da Gonzalo Pineda.

“Tomás Boy fue a festejar contra nosotros y reaccionamos de esa maneram, que no es para nada buena”, admite el contención.

Continuidad en vilo

Acerca de si se quedará o no en el banquillo de Cruz Azul, Enrique Meza deja todo en manos de la directiva celeste, aunque él espera seguir.

“Lo más seguro es que voy a seguir, aunque eso hay que hablarlo con la directiva”, sostiene.

Mañana se reunirá el equipo para planear el próximo torneo.