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Un luchador social tenaz que padeció la represión en 1968

Patricia García| El Universal
Domingo 03 de octubre de 2010
Un luchador social tenaz que padeci la represin en 1968

. (Foto: ARCHIVO EL UNIVERSAL )

Heberto Castillo Martínez se destacó como luchador social. A lo largo de su vida se unió a diversos movimientos, como la lucha de los ferrocarrileros de 1959 y 1960 y de los maestros normalistas, en 1958. En 1961 se involucró en labores políticas con el general Lázaro Cárdenas a través del Movimiento de Liberación Nacional (MLN)

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Heberto Castillo Martínez nació en Veracruz el 23 de agosto de 1928. Fue un apasionado socialista que mantuvo siempre una postura de izquierda. Realizó sus estudios en la Universidad Nacional Autónoma de México, en ingeniería civil, y dedicó más de 20 años a impartir cátedra de Análisis y diseño de estructuras en la UNAM y en el Instituto Politécnico Nacional.

Uno de sus logros profesionales en la rama de la ingeniería fue inventar un sistema de construcción que permite el ahorro de materiales, como el concreto y el acero. A este sistema lo llamó Tridilosa y fue utilizado en importantes construcciones de la capital mexicana, como el World Trade Center y el Centro Médico Siglo XXI, entre otros.

Castillo también se destacó como luchador social. A lo largo de su vida se unió a diversos movimientos, como la lucha de los ferrocarrileros de 1959 y 1960 y de los maestros normalistas, en 1958. En 1961 se involucró en labores políticas con el general Lázaro Cárdenas a través del Movimiento de Liberación Nacional (MLN).

Castillo fue uno de los líderes que destacaron en el Movimiento Estudiantil de 1968. A finales de julio se integró a la Coalición de Maestros, al lado de hombres como Elí de Gortari y Fausto Trejo. El Consejo Nacional de Huelga (CNH) declaró que estaban de acuerdo en que se llevara a cabo un diálogo para resolver el conflicto entre las autoridades y los estudiantes, siempre y cuando se hiciera en un acto público. Poco después, el 21 de agosto, Castillo participó en un debate televisivo en el que apoyó lo dicho por el CNH. Según el fallecido escritor Carlos Monsiváis, luego de esa intervención comenzó la censura en televisión.

En agosto de 1968 el ingeniero Heberto Castillo fue brutalmente golpeado, en tanto que varios estudiantes desaparecieron en los enfrentamientos con los ganaderos.

Según el libro La noche de Tlatelolco, de Elena Poniatowska, el 29 de agosto, tras las agresiones que padeció, Castillo declaró: “La agresión que sufrí es un grave error de quienes la ordenaron…, debe respetarse la vigencia de la Constitución”.

El domingo 15 de septiembre, con motivo del aniversario de la Independencia, Heberto Castillo dio El Grito en la explanada de Ciudad Universitaria sin imaginar lo que pronto acontecería.

Tras los terribles sucesos del 2 de octubre en la Plaza de las Tres Culturas, el ingeniero Castillo permaneció escondido seis meses hasta que el 8 de mayo de 1969 fue aprehendido y recluido en la cárcel de Lecumberri.

En otra parte de La noche de Tlatelolco, Castillo recuerda: “La celda al principio aplasta. Yo desperté al segundo día de recluido con una sensación horrible de asfixia. Los muros sucios, malolientes estaban tan cerca de mí que se metían en mi cerebro, me aplastaban la conciencia como para hacerme entender que la reclusión física implica necesariamente la reclusión mental. Entendí que mi único mundo, mi cosmos estaba dentro de mí”.

 

En 1971 el gobierno buscó la forma de poner en libertad a los presos políticos del movimiento estudiantil, sin que se aceptara que estuvieron recluidos por esa condición. Algunos fueron enviados a Chile; sin embargo, él se negó al exilio.

Castillo fue puesto en libertad en mayo de 1971 y no permitió que su amarga experiencia interviniera con sus deseos de seguir en pie de lucha por defender sus ideales, por lo cual planeó la creación de un partido político comunista, el Partido Mexicano de los Trabajadores. A través de éste logró convertirse en diputado federal.

Ya más involucrado en la política, propuso la alianza de partidos de izquierda, formó el Partido Mexicano Socialista y obtuvo la candidatura a la presidencia en 1988, pero declinó en favor de Cuauhtémoc Cárdenas. En 1994 Castillo ganó la senaduría por Veracruz por el Partido de la Revolución Democrática, del que fue fundador, y en 1996 se convirtió en candidato a la presidencia. Poco después, el 5 de abril de 1997, falleció.

Además de ingeniero y luchador social, Castillo fue autor de libros como Nueva teoría de las estructuras, Libertad bajo protesta: historia de un proceso (1973) y Si te agarrante van a matar (1983); el titulo de este último lo tomó de una frase que le dijo Lázaro Cárdenas cuando se encontraba escondido, antes de ser capturado por el ejército por su participación en el Movimiento del 68.

En 2004 los restos del ingeniero fueron trasladados a la Rotonda de las Personas Ilustres.

 



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