"Como filólogo, es una enorme satisfacción, un honor, y también una gran responsabilidad" , dijo Darío Villanueva, quien será el trigésimo director de la RAE y sucesor de José Manuel Blecua a partir del 8 de enero de 2015.

El cargo dura cuatro años y puede haber reelección por una vez -Víctor García de la Concha fue director por tres períodos excepcionalmente-, pero, en este caso, Blecua pidió expresamente no ser votado.

Villanueva había sido finalista en las elecciones anteriores, y conoce de cerca el trabajo administrativo de la RAE. Incorporado en 2008, desde 2010 era secretario y además fue coordinador de las actividades del tricentenario de la institución, que culminaron con la reciente publicación del nuevo Diccionario de la Lengua Española (DLE).

Es doctor en Filología Hispánica por la Universidad Autónoma de Madrid, y fue rector de la Universidad de Santiago de Compostela entre 1994 y 2002, donde sigue dando clases.Es especialista en literatura comparada y, al entrar a la Real Academia Española, dio un discurso dedicado al Quijote de la Mancha.

También es autor, entre otros libros, de Imágenes de la ciudad. Poesía y cine, de Whitman a Lorca (2008), Teorías del realismo literario (1992) y Estructura y tiempo reducido en la novela (1977).

Villanueva será también presidente de la Asociación de Academias de la Lengua Española, a la que pertenece la Academia Chilena de la Lengua, que dirige Alfredo Matus. "Estuve hace poco con Villanueva en la Feria del Libro de Guadalajara. Es una persona de mucho prestigio intelectual, un muy conocido especialista en literatura. Me parece una acertada elección, porque como secretario se manejó con mucha proyección, y tenía mucho interés por relacionar a las academias entre sí. Es una persona muy abierta e interesada en Hispanoamérica, y muy eficiente", comenta Matus desde Ancud, donde se celebró la incorporación a la Academia Chilena de Rosabetty Muñoz. Mañana, en Osorno, será la de Graciela Huinao.

Crisis y desafíos

No es fácil el panorama que enfrentará Darío Villanueva. La institución acaba de terminar las celebraciones por su tricentenario y, como si se tratara de una resaca, la RAE ahora deberá sobrellevar una crisis.

José Manuel Blecua lo ha dicho públicamente: los fondos del Estado español destinados a la RAE bajaron de 3.6 a 1.6 millones de euros en los últimos dos años. Y ha sostenido numerosas veces que una de las principales preocupaciones de la RAE en este minuto debiera ser rentabilizar las consultas de los usuarios en el sitio de internet.

Cada vez son más, pero no tienen ningún retorno económico para la institución. "Este panorama es un tema que a cualquier director se le presentaría como un hueso duro de roer. Blecua lo estaba sorteando bien, le tocó lo peor de la crisis y pudo llevar a la RAE al mejor nivel dentro del contexto. Estoy convencido de que Darío está en condiciones de enfrentar esta crisis", opina Matus.

sc