Opinion

EN ALGUNA OCASIÓN le platicaba de la problemática interaccionista que enfrenta el simbólico restaurante La Hacienda de los Morales envuelto desde hace tiempo en una intrincada madeja de juicios.

En el rubro restaurantero el lío es bastante conocido puesto que lleva años e involucra a tres ramas de una misma familia, ya en la tercera generación y que por asuntos vinculados a ese inmueble ubicado en Polanco se encuentran profundamente enemistados.

Son los herederos de Antonio Cuevas, cuya familia en el pasado fue propietaria de amplias extensiones de la céntrica y bien cotizada Colonia Polanco.

Lo que hoy queda de La Hacienda de Los Morales es justo donde se asienta el restaurante, la manzana de la discordia, y que es tradicional para lo que hace a comida típica mexicana, aunque habrá que reconocer que ha perdido fuerza dada su problemática interna y el empuje de otros negocios en el amplio caleidoscopio gastronómico que hoy tiene la capital del país.

El lío de las familias Cuevas Santos, Cuevas Eychene y Cuevas Carral, estos vinculados al conocido financiero José Carral Escalante se ha complicado también por juicios que hay con la operadora del restaurante en donde participan algunos socios de la familia al lado de otros empresarios como por ejemplo Pedro Cortina del Valle y Roberto Latapí. El año pasado se llegó incluso a una orden de desahucio y a un amague de huelga por los trabajadores, complicando más el panorama para el simbólico restaurante que hoy dirige Javier Gorozpe.

Sin embargo la buena noticia es que tras años de esfuerzos infructuosos, las tres familias Cuevas finalmente llegaron a un acuerdo para dirimir sus viejas rencillas, lo que se espera pueda abrir una ventana en el futuro de La Hacienda de los Morales.

En el escenario de conflicto nadie ganaba, puesto que el negocio se deterioró y surgieron las dificultades con la operadora a la que se le paga una renta fija más otra variable que se ha hecho una carga.

Por lo que se conoce, las tres familias involucradas estarían dispuestas a vender a un tercero o bien a atraer a un nuevo inversionista que en un ambiente de concordia inyecte recursos para potenciar el negocio.

En los convenios recién suscritos y con plazos preestablecidos participaron los abogados Jorge Mondragón, Gerardo Ramírez Ornelas y Gonzalo Arrangoiz.

Cada una de las familias tiene un 33% de la propiedad de La Hacienda de los Morales y se estima que el negocio pueda andar en unos 35 millones de dólares, aunque parece que todavía faltaría hacer una valuación específica.

También para lo que hace a la operadora, el acuerdo de la familia Cuevas facilitará un arreglo que eventualmente permita desactivar los juicios mercantiles que hay en curso, aunque va a depender de quien compre y de los planes que a su vez tengan los nuevos dueños.

Así que al final de cuentas en este lío imperó la sensatez, aunque habrá que decirlo que tampoco fue obra de la casualidad, puesto que las estrategias de los involucrados también influyeron.

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RECIEN LOS FONDOS que rivalizan con Vitro que preside Adrián Sada, tuvieron un serio traspié en su estrategia legal contra la vidriera más importante del país, tras de que un juez aquí les negara el concurso mercantil que habían presentado por aparte. Después de las gestiones de un visitador se concluyó que no se cumplía con los supuestos. El recurso se desahogaba a la par de otros que esos acreedores han iniciado en EU para obstaculizar las transacciones de Vitro con sus subsidiarias allá e incluso con algunos clientes. Es el caso de Ford o GM, con quienes trataron de bloquear pagos a la regiomontana. Vitro que lleva Hugo Lara tiene a su vez su propia solicitud de concurso preconcertado que sigue latente, puesto que también esos fondos no pudieron validarse como parte para sostener una suspensión. En ese sentido Vitro está ya a la espera de que se les conceda el recurso solicitado y el fallo podría emitirse antes de que concluya el presente mes. Se cree que en ese contexto el entorno para lograr una reestructura será más positivo. Y por cierto, el abogado Alejandro Rivera Gaxiola, quien está al frente de esos litigios de Vitro se mantiene y la contratación de Arturo Quintero en Monterrey sólo es para reforzar el equipo y en asuntos focalizados en esa entidad.

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EL 27 DE abril está programada la asamblea del Grupo Aeroportuario del Pacífico (GAP). Los socios involucrados en esa compañía ya velan armas y no falta quien asegure que auténticamente saldrán chispas. Entre los actores que rivalizan en esa compañía que dirige Fernando Bosque, están las españolas AENA y Abertis, los inversionistas nacionales Laura Diez Barroso, Eduardo Sánchez Navarro y Carlos Laviada y Germán Larrea de GMéxico que ya tiene 19.5% del capital en compras que realizó en el mercado. Ninguno tiene el menor interés en vender, pese a las divergencias.

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Y MIENTRAS AQUI el consumo se recupera de forma lenta, en Brasil una clase media fortalecida potencia un crecimiento muy dinámico. Mabe de Luis Berrondo recién anunció inversiones ahí por 160 millones de dólares. La mexicana que es una de la más influyentes del mundo en la manufactura de electrodomésticos, compró hace año 9 meses a la local BSH Continental. Amén de los recursos que se inyectarán, ya se inició una reestructura para reducir procesos. Sus marcas pasarán de 5 a 3. Ni Mabe, ni Bosch se producirán allá. Sus caballos de batalla serán GE para el segmento de alto poder de compra, Dako para el popular y Continental para el medio. Las ventas de Mabe en Brasil crecerán 11% este año.

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ESTE JUEVES GRUPO Villacero de Julio César Villarreal inaugurará su centro de servicio y una planta de Tubería Helicoidal (TH) que implicaron una inversión de 107 millones de dólares. Aumentará 20% su capacidad instalada. La nueva infraestructura está en el corredor Apodaca-Pesquería. El nuevo centro tiene una capacidad de 840 mil toneladas anuales y la planta de TH de 110 mil toneladas anuales. En ambos proyectos el 80% de la producción se destinará al mercado nacional.

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LA SEMANA PASADA se supo que General Mills, dueña de Häagen Dazs y los cereales Cheerios se va a quedar con el 50% de la francesa Yoplait, la segunda más importante del mundo en yogurt, sólo superada por la también gala Danone que dirige aquí Didier Lamblín. En la lista de postores figuró la mexicana Lala de Eduardo Tricio que es evidente sigue de compras.