Opinion

En definitiva, el reto que le significará a Hugo Sánchez dirigir al Almería será interesante. Atrás quedaron sus arrebatos, como cuando se cansó de cuestionar a Ricardo La Volpe para tumbarlo del Tri, o más tarde cuando ya como técnico de éste aceptó la responsabilidad de dirigirlos rumbo a los Olímpicos y no calificó, cosas de las que tendrá que haber aprendido.

Esta experiencia le servirá, más por la vivencia que acumuló como jugador en el más alto nivel de competencia y luego como técnico, pese a sus etapas, algunas demasiado soberbias, sobre todo cuando estuvo en Pumas, pero también exitosas.

La verdad es que una oportunidad que podría garantizar, ni el mismo Hugo se la esperaba. Sí, las dificultades son grandes, pero no obstante la distancia que hay entre unos y otros equipos, creo que en la parte baja de la tabla se emparejan bastante las condiciones.

Hugo tiene la oportunidad de su vida. Es lo que siempre quiso: dirigir en España, claro que dirigiendo al Real Madrid, aunque primero hay que trabajar un proceso que aquí empieza.

Almería es un equipo discreto, de media tabla para abajo, que tiene que apostar por la lucha del no descenso.

Aún así el panorama es halagüeño. Tiene mucho que motivar y trabajar con un grupo hecho, por llamarle de alguna manera, para no descender y que no deben tener gran diferencia con los demás involucrados en esa parte roja de la clasificación.

En lo personal me da mucho gusto que pueda dirigir en una Liga tan compleja y por supuesto competitiva. Su carrera como jugador lo avala, él mejor que nadie conoce el campeonato español y ahí quedó su imagen y personalidad que valieron más que otra cosa para la gente del Almería.