Plutarco Elías Calles

Cuando se enteró que su columna se publicaría en la parte inferior izquierda de la página, Taibo recordó la frase usada por los camioneros: ...
Domingo 14 de enero de 2007
Plutarco Elías Calles es uno de los ex presidentes de México más controvertidos. Un general apenas sin batalla, hombre más bien de retaguardia de los sonorenses de Álvaro Obregón, llegó a la Presidencia en 1924. Conspirador de naturaleza, la voz del pueblo, el rumor e incluso a veces una calumnia -que no por serlo dejaba de tener fundamento ante los oscuros manejos del personaje- le atribuyeron la autoría intelectual del asesinato de Pancho Villa, lo acusaron de robarle unas elecciones a Vasconcelos, le hicieron tener nexos con el complot que mató a Obregón y lo señalaron como la mano que ejercía el poder detrás de varias presidencias que lo sucedieron.
Incluso lo hicieron protagonista de una conspiración que le salió mal contra Lázaro Cárdenas, la cual terminó derrotándolo políticamente y enviándolo al exilio.
Estas historias son ciertas, medio ciertas y falsas pero probables. Lo han hecho la encarnación del mal estilo de gobernar que sus herederos priístas practicaron durante muchísimos años a costa de los mexicanos.
Era evidente que el personaje se merecía una biografía.
Un ajuste de cuentas.
Una revisión de su historia personal y de la nuestra colectiva.
Acaba de salir a la calle, bajo el sello editorial Historia Zeta, el trabajo de la paciente e inteligente Tere Medina Navascués, Plutarco Elías Campuzano. Mal conocido como presidente Calles.
Los enigmas se aclaran, las historias se cuentan, las dudas se desvanecen; el personaje surge a esta nueva luz pública explicado, en su contexto, gracias a esta nueva investigación.
Y ciertamente, no sale muy bien parado.
Hay que agradecerle además a la autora la fluidez del texto y el contar bien una historia que, por sabida, a veces se olvida.


