Viernes 02 de marzo de 2001
La UNAM, un rico pastel para priístas
El Mosh, punta del iceberg del rector
Como nunca antes desde 1968, el rector Juan Ramón de la Fuente ha convertido la UNAM en un refugio sagrado de priístas y en posiciones de poder para grupos conservadores que combatieron la huelga de 1999 del Consejo General de Huelga. La consolidación del priísta Fernando Pérez Correa y la expulsión de Alejandro Echavarría El Mosh fue una definición política mayor de la rectoría.
El priísmo está de plácemes en la UNAM. El Instituto de Investigaciones Jurídicas es un santuario de ex priístas. Ahí está Jorge Carpizo McGregor, uno de los más conspicuos funcionarios del régimen salinista. El priísmo de Carpizo ha querido ocultarse pero hay evidencias comprobables: en enero de 1994, Carpizo asistió como procurador de la República a un desayuno en Los Pinos para apuntalar a Luis Donaldo Colosio. Ahí Salinas dirigió un mensaje a los priístas presentes: ?No se hagan bolas, el candidato es Colosio?.
En el IIJ han caído Emilio Chuayffet, secretario de Gobernación de Zedillo, y también anda por ahí Sergio García Ramírez, actual secretario general del PRI. El caso de García Ramírez es ejemplar en cuanto al multichambismo político en la UNAM. Cuando estaba la huelga del CGH en su apogeo, García Ramírez asistía a las reuniones de la rectoría para combatir al CGH, pero al terminar se colocaba la cachucha priísta porque era miembro del grupo que iba a seleccionar al candidato priísta. El director del IIJ es Diego Valadés, ex alcalde priísta y ex procurador salinista.
A partir de su posición de privilegio, el rector De la Fuente se ha dedicado a repartir posiciones institucionales a los que se la han jugado con su lucha contra el CGH: desde perredistas hasta priístas, pasando por grupos conservadores. Por ejemplo, De la Fuente le entregó el CCH Naucalpan a la maestra Angélica Galvanares Campos, quien fue dirigente del grupo Mujeres de Blanco. Este grupo promovió movilizaciones virtuales en contra del CGH, como aquellas demostraciones de luces encendidas de autos en el periférico. Las Mujeres de Blanco fue una organización conservadora.
La fracción universitaria del PRD recibió también su cuota de poder en el rectorado de De la Fuente. La esposa de Salvador Martínez della Rocca tiene un cargo en la rectoría. Lo paradójico fue que El Pino Martínez della Rocca fue uno de los más activos líderes del Consejo Nacional de Huelga del 68. Ahora, sin embargo, se puso al lado del gobierno y validó la entrada de la Policía Federal Preventiva a Ciudad Universitaria para aprehender a los dirigentes del CGH. El Pino tuvo su premio a través de su esposa.
Otra posición para el PRD recayó en la persona de René Drucker, designado por el rector como coordinador de investigación científica de la UNAM. Con el aval del PRD, Drucker apareció junto al rector De la Fuente a finales de enero del 2000 en ese acto de provocación contra el CGH: meterse en los territorios del CGH para intentar entregarle a los dirigentes de la huelga los resultados de una consulta amañada. La estrategia era sencilla: generar reacciones agresivas de los cegeacheros para pintarlos como intolerantes. De la Fuente lo logró. El siguiente paso fue provocar la golpiza en la Prepa 3.
Otro de los grupos que apoyó activamente a De la Fuente fue el Grupo (A)Nexos de Héctor Aguilar Camín y sus intelectuales (in)orgánicos prosalinistas. Uno de los personeros fue Rolando Cordera Campos, quien había sido interlocutor del gobierno desde la izquierda pero terminó como locutor del salinismo: era el encargado de los comentarios editoriales en medios cuasioficiales. En premio a su papel contra el CGH, Rolando Cordera Campos brazo operador de Aguilar Camín fue promovido por el rector como miembro de la Junta de Gobierno de la UNAM, el organismo encargado de elegir rectores. La posible reelección de De la Fuente depende de la Junta de Gobierno.
El veterano priísta Fernando Pérez Correa fue de los activos combatientes contra el CGH al lado del rector. Experto en estrategias de provocación, algunas de las maniobras de De la Fuente durante sus choques contra el CGH tenían la marca de Pérez Correa. A pesar de que rompía una tradición progresista en la escuela formadora de cuadros del Estado y de la disidencia, De la Fuente manejó los hilos de poder y logró que Pérez Correa llegara a la dirección de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales. Y en la FCPS ocurrió el incidente que llevó a la expulsión de El Mosh.
La organización del Congreso Universitario, uno de los más señalados compromisos del rector de la Fuente para ocultar los daños causados a la máxima casa de estudios por la intervención de la policía para aprehender a los líderes del CGH cuando sesionaban en el auditorio Che Guevara , quedó en manos de un personero de Carpizo McGregor: José Narro, quien ha sido uno de sus colaboradores cercanos en la UNAM y en Gobernación. A más de un año del manotazo policiaco del rector para recuperar la UNAM, el Congreso Universitario sigue en el limbo.
Las razones están a la vista. El rector De la Fuente no quiere realizar el Congreso mientras el CGH siga teniendo presencia activa en la UNAM. Asimismo, pareciera que el rector busca posponer el Congreso para que se cruce con los tiempos de la terminación de su mandato, para privilegiar la figura del necesariato. El gran debate del Congreso girará en torno de tres puntos fundamentales: la insistencia de la rectoría en el aumento de cuotas, la nueva composición de grupos al interior de la UNAM y la modificación de los órganos de gobierno de la Universidad para hacerlos más democráticos.
En esta lógica, el modelo Carpizo McGregor se va a imponer en la organización del Congreso Universitario. Carpizo McGregor promovió el aumento a las cuotas que pagaban los estudiantes en 1987, pero metió a la UNAM en una crisis que produjo al Consejo Estudiantil Universitario (CEU). El rector Carpizo McGregor fue salvado por la negociación que hizo Mario Ruiz Massieu, desde entonces uno de sus hombres de más confianza. Durante la huelga del CGH en 1999, Carpizo participó en movilizaciones contra los paristas. Por tanto, el Congreso Universitario será fundamentalmente antiCGH.
Así, la decisión del Tribunal Universitario de expulsar a Alejandro Echavarría El Mosh y a otros dirigentes del CGH tuvo motivaciones personales De la Fuente y Pérez Correa no resistieron las críticas y acusaciones del cegeachero cuando se negó a recibir la medalla Gabino Barreda por sus altas calificaciones, pero también buscó romper el precario equilibrio de fuerzas en la UNAM por la presencia insistente del CGH en movilizaciones. Aunque sin la fuerza que tuvo al arranque del movimiento en 1999, el CGH penetró hasta el fondo de las estructuras estudiantiles de la UNAM.
El Congreso Universitario será fundamental para redefinir el papel de la UNAM después de la derrota del PRI en las elecciones presidenciales del 2000. La UNAM fue creada y fortalecida por el Estado priísta como una estructura para capacitar los recursos humanos de ese Estado. Sin embargo, la UNAM siempre tuvo en su seno a organizaciones y personalidades profundamente críticas del Estado y de sus últimas definiciones neoliberales. Por tanto, el rector De la Fuente ha querido llevar a la UNAM a los rangos de la excelencia que la aleje de las necesidades de los grupos sociales marginados por su condición de pobreza.
Asimismo, la gran reforma de la UNAM tiene que venir por el replanteamiento de sus órganos de gobierno. El rector De la Fuente demostró cómo el Tribunal Universitario es capaz de expulsar a dirigentes políticos de organizaciones universitarias, pero incapaz de sacar de la UNAM a algún porro o a grupos priístas que han desviado el rumbo social de la máxima casa de estudios. El Consejo Universitario opera como un instrumento controlado por la rectoría, como lo demostró el rector Francisco Barnés cuando aprobó el alza de cuotas estudiantiles con un Consejo Universitario controlado.
La UNAM disputará su futuro: o una universidad para un nuevo país o una universidad para grupos y cacicazgos. De la Fuente quiere una universidad mediatizada y sin disidencia.
www.indicador-politico.com.mx
indicador@aol.com


