A través de la radio se percibe la angustia. La voz es temblorosa. Se escucha cómo uno de los combatientes de incendios forestales jadea. Se reporta. Necesita refuerzos para rodear al fuego. Las llamas se extienden. Desde lejos, se percibe cómo el humo se abre paso entre miles de árboles, cómo se come al bosque del sur del DF.

El 2011 es un año delicado, atípico. Las condiciones meteorológicas no ayudan. No hay pronóstico alentador para este año. En 2010, la humedad de las lluvias llenó al bosque de vegetación e hizo crecer a los pastizales hasta un metro de altura.

Luego, las heladas tempranas, la primera fue a finales de septiembre, secaron rápido el pasto. Prácticamente no hubo otoño ni tiempo para realizar labores de prevención de incendios. Las rachas de viento secaron al bosque. Lo convirtieron en combustible.

El 2011 es difícil, cualquier chispa enciende al bosque. Van más de 330 incendios en Tlalpan; 871, en todo el suelo de conservación del DF. Apenas empieza la temporada crítica.

Lo explica Víctor Martínez, líder combatiente. Es responsable del área de Conservación y Obras del Centro Regional 2 de la Comisión de Recursos Naturales (Corena) de la Secretaría de Medio Ambiente del DF.

En la frecuencia de la radio se escuchan los reportes de otros incendios. Que si en el paraje Las Cocinas. Que si en el Quepil. O el Llanito Amarillo. Hay 400 parajes en Tlalpan. Los brigadistas los ubican a todos.

Son ellos los que combaten los incendios en el bosque. No son los bomberos, ni Protección Civil. Son las Heroicas Brigadas contra Incendios Forestales de la Corena las que atacan al fuego, cuerpo a cuerpo, sin agua, a pala y tierra. En Tlalpan, son 272 personas, 40% son mujeres, organizadas en 16 brigadas, las que conocen a la perfección, y cuidan, las 25 mil 426 hectáreas de suelo de conservación de esa delegación, que tiene una superficie de casi 31 mil hectáreas.

“Nuestras brigadas son heroicas porque cuidan los pulmones de la ciudad, la zona donde se recargan los mantos acuíferos”, asegura David Quiroz, coordinador regional de la Corena en Tlalpan.

“El espíritu de los combatientes es conservar el suelo de conservación, es decir, 55% (87 mil 294 hectáreas) del DF”, agrega y pide “que la gente sepa que existimos”.

“Como en toda emergencia, lo principal es conservar la calma”, dice por su parte Víctor Martínez, mientras sigue cargando su vehículo de víveres y agua para sus compañeros que ya están combatiendo.