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En los últimos tres meses de 2010, el gobierno capitalino recibió al menos cinco mil denuncias de mujeres que, golpeadas por hombres, pararon en el hospital con lesiones que tardan en sanar más de 15 días.

Esas cifras se suman en el total de los 63 mil 690 delitos que se denunciaron del 2007 a abril del 2010 ante la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF).

Datos oficiales indican que de, 46 mil 111 mujeres que fueron atendidas en los cuatro centros especializados para tratar a las víctimas del delito que se vincula a la violencia hacia las mujeres. Ahí, alrededor de un tercio (36%) acusó a su agresor de violencia psicoemocional, 30% de violencia física y 18% de violencia sexual, violación o abuso.

En este escenario, la presidenta de la Comisión de Gobierno de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), Alejandra Barrales, alertó de la gravedad del fenómeno pues dijo que en muchos de los casos derivan en feminicidios.

En entrevista, informó que en el próximo periodo de sesiones propondrá una iniciativa para la deten ción y arresto inconmutable de al menos 36 horas y sin opción a multa a quien golpee a una mujer, mientras que las denuncias deberán perseguirse de oficio, sin otorgamiento de perdón. El Código Penal actual indica que se perseguirá a quien provoque lesiones simples —es decir, aquellas que sanan en menos de 15 días—, sólo si hay una querella o a petición de parte. De acuerdo con la propuesta legislativa, esa condición provoca que en 90% de los casos las mujeres perdonen a sus agresores.

Barrales Madaleno comentó que “en nuestro albergue para mujeres violentadas tenemos tres mil mujeres que están ahí diariamente, es la totalidad del cupo, pero no quiere decir que son todas, por eso es alarmante el dato. Son mujeres que son jaloneadas, maltratadas; estamos hablando de lesiones, golpes, gente que va al hospital, es un tema que tenemos que impedir y haremos lo que esté a nuestro alcance en la asamblea”.

Diputados locales del PRD propusieron también instalar “el pizarrón de la vergüenza” en el Zócalo capitalino, para llevar el conteo de los feminicidios que se registran en el país, para terminar con la invisibilidad que sufre el sector femenino. (Con información de Phenélope Aldaz)