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Exigen a PGJ indagar robo de niños

Geovana Royacelli| El Universal
Viernes 28 de mayo de 2010
Los padres de dos menores robados hace 10 días exigieron ayuda de las autoridades

Clínica de Periodismo

“Si tuvieramos dinero o fuéramos influyentes, las autoridades harían su trabajo y mis hijos estarían con nosotros”, dijo Javier Covarrubias, padre de los menores Isis Liliana, de un año y medio, y Darien Isaí Covarrubias Merino, de dos años siete meses de edad, quienes fueron robados de sus brazos el pasado 18 de mayo mientras era golpeado.

Los hechos ocurrieron en la avenida del Trabajo, entre las calles de Constancia y Granada, en la colonia Morelos, aproximadamente a las dos de la tarde. “Bajamos de un microbús, yo iba cargando a Darién porque iba dormido, y bajé a Liliana porque le iba a poner sus zapatos para que caminara”, cuenta Javier.

“Sentí un empujón por la espalda, me caí, hice al niño a un lado y me empezaron a golpear. Pensé que me iban a matar, oí a mi hijo llorar, luego ya no lo escuché. Dejaron de golpearme, me levanté y vi a un sujeto correr, sólo pensé en ir tras él, y en ese momento mis hijos ya no estaban”.

De víctima a acusado

Después de lo ocurrido, Javier acudió ante las autoridades del Ministerio Público en la delegación Gustavo A. Madero, donde se inició la averiguación previa con la clave FGAM/GAM-4/T1/1122/10-5.

Asegura que sufrió por más de 30 horas el acoso constante de las autoridades y peritos de la dependencia, quienes lo señalaron como culpable del rapto de sus hijos: “Todos me decían que ya dijera la verdad, que yo los había vendido, que los tenía o que sabía dónde estaban. Así fue todo el tiempo que me tuvieron ahí; además, no me permitían hacer llamadas ni salir del Ministerio Público”, señaló.

El padre de los menores aseguró que las autoridades lo inculparon en diferentes ocasiones: “Me cansé de decirles que no sabía nada, querían que me contradijera pero no lo hice, porque estoy diciendo la verdad”, asegura Javier.

A 10 días de ocurridos los hechos, los menores no han sido localizados y sus padres enviaron un mensaje a la autoridades: “Sabemos que no es el caso de Paulette, que no es Diego (Fernández de Cevallos), pero son nuestros hijos y los queremos de regreso, exigimos que las autoridades se pongan a trabajar”.

Irma Merino es la madre de los pequeños, y pide a quien los tenga que le sean devueltos. “Queremos volver a confiar en las autoridades, queremos que nos ayuden como han ayudado a otros”, dijo.



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