Este joven de 17 años, amante de la música, nació con una malformación congénita que impidió el desarrollo de su brazo derecho.

Así, con el sinsabor de una meta truncada, lo conoció Juan Camilo Monroy hace un año. Acababa de culminar la carrera de diseño en la Universidad de los Andes y, coincidencialmente, su trabajo de grado versó sobre la impresión de una prótesis en 3D.

En ese momento Diego, que había consultado y reconsultado a especialistas, con la esperanza de que le dieran una salida a su impedimento, tenía un cajón con 10 prótesis que le había entregado en distintos momentos su EPS; estas simulan ser una mano, pero no le permiten ni siquiera escribir.

Para él era frustrante pensar que si era muy difícil agarrar un esfero con ellas, aprender a tocar guitarra era imposible.

"A mí me gusta la música. Mis amigos tocan guitarra y yo quiero aprender también y hasta tener mi propia banda", dice.

Tras hablar del tema con Juan Camilo entendió que hacerlo le exigía tener una prótesis distinta, funcional y con un nivel de personalización tal que le permitiera movimientos exactos para manipular el instrumento.

Es más, la imaginaba de color negro y grabada con el logo de su banda favorita: Linkin Park.

Tras meses de estudiar el caso de Diego, Juan Camilo diseñó una prótesis especial para él, que luego convirtió en realidad gracias a una impresora 3D; el costo final fue de 600 mil pesos, un valor 85 por ciento menor que el de una prótesis tradicional.

Esta prótesis está impresa en ABS, un plástico resistente a los golpes; se ajusta al brazo a presión, se desliza sobre las cuerdas de la guitarra sin dañarla y le permite a Diego tocarla por más de cinco horas seguidas, sin ningún problema.

A él, valga decirlo, le bastaron dos semanas para tocar piezas de Guns n' Roses.

Juan Camilo pasaba tardes enteras enseñándole canciones y Diego tocaba guitarra en su habitación toda la semana.

Gracias a esos avances este joven, que veía con cierta frustración la vieja guitarra de la casa, colgada y llena de polvo, pudo pedir una nueva para Navidad.

Diego dice que la prótesis realmente ha cambiado cosas en su vida.

Para él antes era muy difícil encajar. "Yo pensaba: ‘quiero ser músico, pero no puedo ser músico solo porque me guste la música, necesito hacer música' ", cuenta.

Inspirado en eso escribió una canción.

"De eso se trataba todo", dice Juan Camilo, satisfecho de haberle dado a Diego una herramienta que le permitiera hacer música.

Contentos con el resultado, Juan Camilo y su hermana Andrea fundaron 3dglück, una empresa que pretende crear elementos impresos en 3D, diseñados especialmente para cada situación, acorde a las necesidades de las personas.

Para darse a conocer, grabaron un video en el que Diego muestra su nueva habilidad, toca guitarra y es una persona más segura.

En tres días el video alcanzó las 30 mil vistas en YouTube y es noticia en las páginas de tecnología más importantes del mundo.

Aunque la impresión 3D en Colombia aún es bastante precaria, cada día está sonando con mayor fuerza, en el futuro esta herramienta permitirá imprimir cualquier cosa.

Con esta tecnología la humanidad se puede sentar mientras se imprime la realidad en 3D.

kal