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Genoma indígena es clave de diabetes y obesidad

Marta Menjívar, coordinadora del posgrado en Bioquímica Clínica de la Facultad de Química de la UNAM, dijo que el sistema de salud debe considerar que la población mexicana tiene un genoma amerindio

El mayor conocimiento del genoma de las poblaciones y de las personas permitirá hacer intervenciones positivas en el mismo y así mejorar la calidad de vida de las personas. (Foto: Especial )

Martes 30 de agosto de 2011 Redacción | El Universal00:44
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El estudio de la genómica de los pueblos indígenas podría ser la clave para comprender mejor problemas nacionales de salud, como diabetes y obesidad, que afectan a la población mestiza mexicana, afirmó la doctora  Marta Alicia Menjívar Iraheta, investigadora del departamento de Biología de la Facultad de Química de la UNAM.

Marta Alicia Menjívar subrayó la importancia de establecer un sistema de salud adecuado para que se tome en cuenta que los medicamentos o cualquier intervención de salud que se haga en la población mexicana, debe considerar que   tenemos un genoma amerindio.

A hablar de enfermedades concretas, dijo que la alta prevalencia de la diabetes en México es un signo de que nuestra población tiene una alta susceptibilidad al desarrollo de esta enfermedad. Dicha susceptibilidad, explicó, puede estar asociada al medio ambiente, como la dieta o un estilo de vida sedentario, pero, sin duda, tiene un componente genético, porque hay comunidades aisladas que presentan diferentes niveles de prevalencia de la enfermedad.

Estudios publicados de genética de poblaciones indican que los mexicanos tenemos, en promedio nacional, 70% de un componente genético indígena, 25% caucásico y 5% ciento de componente africano, indicó la especialista en genética molecular de la diabetes.

Dado que existe en la población mestiza mexicana un alto porcentaje de componente genético indígena, insistió, debemos dirigir esfuerzos al estudio de los 62 grupos indígenas que aún existen en México para conocer la genómica de la población mexicana, la genómica de las enfermedades y la forma cómo se deben abordar.

Análisis en población mazahua

La también coordinadora del posgrado en Bioquímica Clínica de la Facultad de Química de la UNAM, dio a conocer que ella y su colaboradores han estudiado la comunidad mazahua de Jaltepec, en el Estado de México.

La comunidad fue elegida, abundó, por sus características de aislamiento, tradiciones, costumbres y lengua, que sugieren una "pureza étnica".

Posteriormente, mediante pruebas de grupo sanguíneo y antígenos de histocompatibilidad que se utilizan para conocer el parentesco entre las personas, se comprobó que esa comunidad mazahua tiene un componente de pureza muy elevado y puede recurrirse a ellos para estudiar el componente indígena del genoma de la población mexicana.

Entre otros datos, los estudios revelaron que la población mazahua se distingue de los demás grupos étnicos del planeta, y también del mestizo mexicano, en que sus genes tienen un componente caucásico.

Tras la huella de la diabetes

Por otro lado, la especialista de la Facultad de Química colabora con el Hospital Juárez para tomar muestras sanguíneas de individuos con aparición temprana y tardía de diabetes, así como de personas sanas mayores de 60 años que en tres generaciones no han presentado antecedentes de diabetes, que son tomados como control.

Para conocer el fondo genético que pudiera producir susceptibilidad a la diabetes, el grupo de investigación de la doctora Marta Alicia Menjívar ha estudiado genes que participan tanto en el desarrollo como en la función del páncreas, un órgano clave en el estudio de esta enfermedad.

El factor hepatocítico nuclear 4 alfa, es uno de los primeros genes que se describieron  relacionados con la diabetes. En ese gen existe una mutación conocida como T130I, la cual ha sido relacionada con la aparición de diabetes en individuos japoneses y daneses.

Estudiando este gen y su mutación en las poblaciones seleccionadas, la investigadora y sus colaboradores encontraron esta mutación T130I en un porcentaje elevado en la población diabética del Hospital Juárez de México, y con una frecuencia mucho mayor que en otras latitudes del planeta.

En las poblaciones indígenas no diabéticas también encontraron la presencia de esta mutación del gen con frecuencias elevadas, con excepción de la población yaqui. Los especialistas sugieren que la existencia de esta mutación del gen en la población indígena puede contribuir a la aparición de diabetes en el mestizo mexicano.

La científica, miembro del Sistema Nacional de Investigadores, dijo que el propósito de sus estudios es hacer ciencia aplicada. Conociendo lo que llamó el etnosoma, es decir, el fondo genético, su objetivo es estudiar cómo los grupos más sensibles y desprotegidos de la sociedad responden a un tratamiento, por ejemplo, una intervención alimenticia.

"No sólo se detecta cuál es el origen de los genes relacionados con la diabetes, sino que también se puede hacer una contribución a la población indígena", dijo la investigadora.

Con este enfoque de ciencia aplicada se está trabajando en Chimalhuacán, estado de México, una región en la que convergen casi todas las etnias de la nación. El objetivo de trabajar en esta región, apuntó, es hacer una caracterización de la población y posteriormente una intervención alimenticia, conociendo el fondo genético.

"Si bien la diabetes no es fruto únicamente de la genómica de una persona, hay que tomar toda la historia de la persona, desde la programación fetal hasta el medio ambiente y factores como el estrés y el tipo de vida que lleva; el conocimiento genómico, sin duda, contribuirá a un mejor tratamiento de esta enfermedad", aseguró.

La profesora de la Facultad de Química de la UNAM previó que en el transcurso de una década los avances de la genómica permitirán que cada persona cuente con su propio genoma, como ya lo tienen algunos individuos en el planeta, y pueda conocer a qué enfermedades es susceptible y algunos otros datos curiosos como su propensión a ser infiel o la intolerancia a la lactosa.

El mayor conocimiento del genoma de las poblaciones y de las personas permitirá hacer intervenciones positivas en el mismo y así mejorar la calidad de vida de las personas, concluyó.

 

 

 

(Dirección General de Divulgación de la Ciencia, UNAM)

 

 

 

vrs



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